La expansión del pistacho, el rey del fruto seco ecológico que aspirar a generar 100.000 empleos

El pistacho se ha distinguido como uno de los cultivos con mayor crecimiento en España en los últimos años. La tendencia se ha hecho prácticamente incontenible desde 2014, hasta llegar a las 79.209 hectáreas en la campaña pasada, con un incremento del 58,6 % respecto a la media de los últimos cinco años.

Según los últimos datos oficiales, España tiene una superficie total de 739.638 hectáreas dedicadas al cultivo de frutos secos, de ellas, el 10,3 % están ocupadas por la producción de pistacho, que supone, después de la almendra, el segundo cultivo en superficie.

Este alza ha ido acompañado de un aumento de la superficie plantada de pistacho en ecológico, que después del almendro es el fruto seco con mayor superficie de ecológico (13 %) respecto al resto de productos.

Según el informe 'Sector del pistacho en España: Análisis', analizado por la empresa especializada en el cultivo de pistacho Agroptimum, el pistacho podría crear 100.000 nuevos puestos en los próximos cinco años.

El crecimiento del pistacho en España atraviesa un momento de estabilización, ya que después del boom se han acometido arranques en plantaciones. Castilla-La Mancha se distingue como la tierra por excelencia para el pistacho en España al acaparar un 74 % de la cosecha: de las 7.500 toneladas recolectadas en la pasada campaña 5.600 corresponden a la región.

Tal y como recoge EFE, la producción ha alcanzado las 23.967 toneladas, lo que supone un incremento del 20,5 % respecto a la anterior y del 65,8 % si se tiene en cuenta la media de las últimas cinco cosechas. La evolución del cultivo de pistacho en los últimos años ha sido muy grande«, ha asegurado al medio citado el director técnico del portal especializado PistachoPro, Mario González, quien ha añadido que »muchas personas han optado por este cultivo como sustitución a otros menos rentables como el cereal".

González cree que «con el tiempo, el pistacho va a ser un cultivo más, ya asentado, pero también supondrá un pilar en la producción nacional, además, ha considerado que »a nivel de importancia se pondrá en el mismo nivel que otros cultivos leñosos «aunque» en materia de industria falta mucho".

A juicio de la entidad, y tal y como ha revelado el informe, la evolución positiva en la producción de este fruto seco ha generado un «gran impacto económico» en cuanto al aumento de la generación de ingresos, el desarrollo del sector industrial asociado y el fomento de la economía rural.

La creación de empleo en torno al mismo no sólo radica en el propio trabajo a pie de campo, sino que, según las estimaciones de la empresa, se generarán puestos de trabajo «desde el laboratorio, pasando por el procesamiento en las plantas, hasta la distribución y exportación».

Entre los perfiles demandados se encuentran expertos en genética, ingenieros agrónomos e industriales y programadores expertos en datos.

«Cada vez fichamos a personas con conocimientos más específicos para abordar las altas exigencias de un cultivo muy tecnificado», ha detallado el director General de Agroptimum, Ángel Minaya, quien ha asegurado que necesitan hasta programadores de datos para detectar plagas a través de la inteligencia artificial (IA).