El PP de Cádiz deja en manos de Óscar Puente la decisión sobre el cambio de nombre del Puente Carranza

La denominación del Puente Carranza puede tener las horas contadas. En el último mes se ha incrementado la presión para cambiar el nombre en virtud de las leyes de Memoria Democrática y Memoria Histórica. Esta infraestructura toma su nombre de José León de Carranza, el alcalde de Cádiz en cuyo mandato se impulsó la construcción del puente, inaugurado en 1969.

En la última década se ha cambiado la denominación de la avenida Ramón de Carranza —padre de José León— por Cuatro de Diciembre y del estadio Carranza, renombrado en 2021 como Nuevo Mirandilla. En 2025 podría tocarle el turno a la conexión más importante de la ciudad hasta la construcción del puente de la Constitución de 1812.

El 16 de mayo, la diputada nacional de Sumar por la provincia de Cádiz, Esther Gil de Reboleño, remitió un escrito al Ministro de Transportes y Movilidad Sostenible, Óscar Puente, para solicitar el cambio de denominación del Puente José León de Carranza por el de Rafael Alberti. Para Sumar, el puente «honra la figura de un dirigente que formó parte del aparato institucional del régimen y cuyo legado no representa los valores de convivencia y pluralidad que hoy queremos promover».

Propuesta conjunta de la izquierda

El nombre de Carranza llegó ayer al Pleno del Ayuntamiento de Cádiz con una propuesta conjunta de los grupos municipales del PSOE y Adelante Izquierda Gaditana. La idea era votar el cambio de denominación a Rafael Alberti, en honor al poeta de El Puerto de Santa María exiliado durante el franquismo.

El PP, grupo mayoritario en el Pleno, reaccionó con una solución intermedia: una enmienda de sustitución a la propuesta de la izquierda para que sea finalmente Transportes quien decida. Con los votos a favor del PP y el voto en contra del resto de grupos, la enmienda salió adelante. Maite González, teniente de alcalde de Gestión Económica, consideró en la defensa que «el Ministerio de Transportes es el competente en cuanto a la nomenclatura del puente», por lo que debería decidir «en cuanto a esas dos propuestas —las cartas remitidas por Sumar y UGT— en cumplimiento de la Ley de Memoria Histórica»

De este modo, la pelota cae en el tejado del Gobierno central y, en concreto, del ministro Óscar Puente. Ello implica que, pese a que no se consumó en el Pleno de ayer, las posibilidades de un cambio de denominación están cada vez más cerca. Rafael Alberti es el nombre que concita mayores adhesiones, mientras que Puente de los Astilleros o de la Lucha Obrera son propuestas más minoritarios. Más de 50 años después de su erección, el Puente Carranza podría dejar de llamarse, al menos oficialmente, de ese modo. Sería el último Carranza que quedara por 'limpiar' del callejero gaditano.