En un momento del "paseo", uno de los jabalíes se despistó de la manada y se acercó a un viandante

En un momento del «paseo», uno de los jabalíes se despistó de la manada y se acercó a un viandanteInstagram

Málaga

Una piara de jabalíes se pasea por un centro comercial de Fuengirola ante la atónita mirada de los clientes

Sigue abierto el debate sobre cómo hacer frente a la multiplicación de estos animales en zonas urbanas

Eran cerca de las 19:00 horas de este pasado lunes en el Centro Comercial Miramar, en la localidad malagueña de Fuengirola, cuando una decena de jabalíes entraron por la puerta situada junto al aparcamiento exterior para darse un paseo por las instalaciones, ante la sorpresa de los clientes y trabajadores, que no dudaron en sacar sus teléfonos móviles para inmortalizar el insólito momento.

Fue el personal de seguridad el que, tras recorrer varios metros en dirección a las escaleras mecánicas, consiguió conducir a los animales hacia el exterior, sin que ocasionaran incidente de ningún tipo durante su aventura. Tal y como se puede apreciar en las imágenes, el ejemplar que dirigía a la manada era de mayor tamaño, mientras que el resto parecían ser sus crías.

Las imágenes han sido compartidas en redes sociales por los testigos del curioso acontecimiento y han despertado todo tipo de comentarios y reacciones, la mayoría buscando resaltar el lado cómico de la situación, a pesar de la peligrosidad que conlleva este tipo de incursiones en zonas habitadas y transitadas por ciudadanos.

Y es que la presencia de jabalíes en los núcleos urbanos de diferentes localidades de la Costa del Sol y de la propia capital (han llegado a ser vistos cruzando el Guadalmedina o paseando por las playas) se está tornando cada vez más habitual, pese a que su hábitat natural son los Montes de Málaga. Su objetivo no es otro que la búsqueda de comida y, aunque no parecen peligrosos, es esencial extremar la precaución para evitar cualquier tipo de ataque.

El debate sigue abierto sobre cómo hacer frente a esta proliferación de jabalíes. Los vecinos del barrio Miramar, junto al ya famoso centro comercial, se muestran preocupados por la presencia diaria de estos animales en las inmediaciones de sus viviendas, generando situaciones de inseguridad durante todo el día.

Sin embargo, todavía hay ciudadanos que, lejos de comprender la gravedad de la situación, la intensifican. Así, la Policía Local de Mijas ha multado recientemente a una persona que estaba dando de comer a jabalíes en un parque de la localidad a pesar de estar prohibido por la ordenanza municipal y castigado con una sanción económica de 250 euros.

El Ayuntamiento de Málaga ha tomado la misma iniciativa al castigar también este tipo de actuaciones y continúa buscando soluciones para que los jabalíes vuelvan al monte. Esto incluye, por ejemplo, la plantación de determinados tipos de hierbas para proporcionarles alimento y la implementación de medidas disuasorias, como olores y sonidos que los incomoden.

El Consistorio de Francisco de la Torre ha informado de que, a pesar de lo que las asociaciones animalistas puedan opinar, «si las medidas disuasorias no son suficientes, se recurrirá nuevamente al uso de dardos narcotizantes». Respaldados por la autorización de la Junta de Andalucía, se busca controlar las poblaciones tanto de jabalíes como de cerdos asilvestrados en zonas de dominio público hidráulico, donde este tipo de animales suponen un riesgo para el ecosistema y la seguridad vial.

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