Manuel Fernández de la Peña, fundador de la asociación provida de Mairena del Alcor, tristemente fallecidoCedida

Sevilla

Fallece el fundador de la asociación Provida de Mairena del Alcor tras una vida de ayuda a la maternidad

Fernández de la Peña fundó la asociación a raíz del llamamiento en contra del aborto que hizo el papa San Juan Pablo II en su primera visita a España

Manuel Fernández de la Peña, fundador de la asociación Provida de Mairena del Alcor (Sevilla), ha fallecido este martes de forma repentina. Atrás deja una vida dedicada a la defensa de la vida humana.

Fernández de la Peña fue el alma y motor de la asociación Provida de Mairena del Alcor, fundada a raíz de la homilía del papa San Juan Pablo II en la plaza de Colón de Madrid en 1982, en la que afirmó que «nunca se puede legitimar la muerte de un inocente», en referencia al aborto. Inspirado por estas palabras, Manolo dedicó su vida a proteger a los más vulnerables, especialmente a los niños por nacer y a las madres en situación de riesgo, ofreciendo apoyo a quienes a menudo eran marginadas, despreciadas o abandonadas.

Durante décadas, la labor de Fernández de la Peña y de la asociación que fundó incluyó acompañamiento a madres embarazadas, campañas de concienciación y la promoción de valores en defensa de la vida.

Entre sus proyectos más recientes destaca la inauguración de un monumento de 300 kilos de bronce en Mairena del Alcor, obra de la escultora Constanza Gavira, que representa a una mujer embarazada cargando a un niño como símbolo de protección de los derechos de los no nacidos y el apoyo a las madres.

El presidente de la asociación, en sus palabras, recordaba que el monumento y la labor de Provida buscan mantener viva la conciencia sobre la cultura de la vida y ofrecer esperanza a quienes más lo necesitan. La asociación continúa con su labor y mantiene abierta la posibilidad de que la comunidad participe en sus proyectos a través de donaciones y colaboración ciudadana.

La muerte de Manuel Fernández de la Peña deja un vacío profundo en toda la comunidad provida y en Mairena del Alcor, donde vivía y tenía una nave industrial con material para ayudar a madres sin recursos; no obstante, su legado y su ejemplo seguirán guiando la defensa de la vida y la ayuda a los más vulnerables.