
Bandera de la ciudad de Zamora, la Seña Bermeja
La curiosa historia de la bandera 'rota' de Zamora, única en España
La Seña Bermeja tiene su origen en la figura del lusitano Viriato, «el terror de Roma», y destaca por estar compuesta por ocho tiras rojas y una banda verde que van sueltas
Las banderas suelen tener un origen militar y en el caso de la de la ciudad de Zamora, por partida doble y con Viriato y el Rey Fernando el Católico como protagonistas. Estas dos figuras históricas son las culpables de que esta enseña castellanoleonesa, la Seña Bermeja, luzca su peculiar aspecto, único en España, que se caracteriza por sus ocho tiras rojas y una banda verde, que van sueltas y le otorgan esa apariencia de estar rota.
Su origen se remonta al siglo II a.C., en el contexto de las guerras lusitanas, en las que la República de Roma trataba de conquistar a un grupo de pueblos del oeste de la Península Ibérica a los que denominaban lusitanos (que posteriormente se convertirían en los habitantes de la provincia romana de la Lusitania).
Y entre estos estaba Viriato, una suerte de Astérix ibérico de carne y hueso que fue apodado como «el terror de Roma». Este líder guerrero, del que Portugal y España se disputan su procedencia, habría sido, según el historiador romano Tito Livio, un pastor que se convirtió en cazador y en soldado, aunque no hay unanimidad sobre sus orígenes.
En todo caso, en Zamora está considerado como su principal figura histórica y su presencia se hace notar por toda la ciudad y en sus símbolos. Viriato, ya fuese 'portugués' o 'español', logró ocho victorias contra el ejército romano, en campañas realizadas tanto en Lusitania como en la Hispania Ulterior y Citerior antes de su asesinato, en el que se basaría la célebre frase «Roma no paga traidores».

Viriato, pintura de Ramon Padró y Pedret
Las ocho tiras rojas de la Seña Bermeja se corresponden con esas victorias del «bárbaro» lusitano, aunque sobre los detalles de su procedencia exacta hay varias versiones. De acuerdo con la página de Turismo del Ayuntamiento de Zamora, estas bandas podrían ser jirones de la capa de Viriato que él mismo arrancaría tras las batallas ganadas. También señala que podría ser que «como mandaba la ceremonia del imperio de la época, cada general derrotado entregaba al vencedor la banda que adornaba su atuendo militar, roja en el caso de los romanos, Viriato ató cada una de las bandas obtenidas a su lanza».
Una última versión es la de que las tiras de la bandera zamorana tendrían su origen en jirones de las capas de los pretores y generales romanos derrotados. De una manera u otra, estas ocho bandas rojas se convertirían en la bandera de Zamora hasta que entró en acción Fernando II de Aragón 16 siglos después y le añadiría la actual franja verde. En 1476, después de conocer la historia de la bandera, decidió agradecer el apoyo de los zamoranos en la batalla de Toro colocando la banda que lucía Isabel la Católica, verde esmeralda.

Bandera de Zamora con el escudo de la provincia de Zamora
Un poema histórico encargado por el propio Monarca describe los elementos de la que sería desde entonces la bandera de Zamora:
La noble seña sin falta
bermeja de nueve puntas,
de esmeralda la más alta
que Viriato puso juntas,
en campo blanco se esmalta.
¿Quién es esa gran señora?
La numantina Zamora,
donde el niño se despeña
por dejar libre la enseña
que siempre fue vencedora.
Errores en su uso
Además de una larga historia y un aspecto tan original, la bandera de Zamora tiene otras peculiaridades, que pasan por su mal uso. La Seña Bermeja es la bandera de Zamora y solo de la ciudad de Zamora, no de la provincia, que no tiene bandera -una particularidad que solo comparte en España con la provincia de Alicante-, por su empleo en otros municipios más allá de la capital es incorrecto.
El otro error común es el de interpretar que contiene ocho finas tiras blancas, que en realidad son el espacio entre las tiras rojas y la verde. Y es que hoy en día es común ver la Seña Bermeja como una pieza única de tela que esquematiza el diseño original.