La alcaldesa de Burgos, Cristina Ayala, lee el manifiesto en el acto de recuerdo a Miguel Ángel Blanco
Los socialistas se marchan del homenaje a Miguel Ángel Blanco en Burgos tras recordarles la alcaldesa que gobiernan gracias a Bildu
La regidora 'popular' ha leído un manifiesto en el que apuntaba a que «los testaferros de ETA tienen más poder político que nunca porque el Gobierno de España ha pactado con ellos para mantenerse en el poder»
El Ayuntamiento de Burgos ha rendido homenaje este jueves a Miguel Ángel Blanco, el concejal del PP en Ermua (Vizcaya) secuestrado un 10 de julio de 1997 y asesinado por ETA tres días después, en un acto en el cual representantes políticos de la provincia han leído un manifiesto en cuya parte final se hacía referencia a que el PSOE Gobierna España con los herederos de la banda, momento en el cual los socialistas que estaban presentes se han ausentado.
La alcaldesa de Burgos, Cristina Ayala (PP), leía el párrafo del manifiesto que decía que «ETA ya no mata, pero su legado permanece», y continuaba diciendo que «los testaferros de ETA –en alusión a Bildu– tienen más poder político que nunca porque el Gobierno de España ha pactado con ellos para mantenerse en el poder y esta situación ética y políticamente insostenible es una anomalía democrática que revictimiza a las víctimas del terrorismo».
Los representantes del PSOE en el acto, el subdelegado del Gobierno, Pedro de la Fuente y el concejal portavoz en el Ayuntamiento de Burgos, Daniel de la Rosa, se han ausentado del acto, organizado por el Consistorio y que se encontraba ya en los minutos finales.
La alcaldesa ha presidido el acto de recuerdo al joven edil que sirve como «ejemplo y legado cívico para toda la sociedad española» de «unidad frente al terrorismo y de compromiso democrático».
El acto ha consistido en la colocación de una corona de laurel y de claveles blancos en recuerdo de aquellas manos blancas que poblaron España pidiendo la liberación de Blanco.
El presidente de la Diputación Provincial de Burgos, Borja Suárez, el subdelegado del Gobierno, Pedro de la Fuente, el delegado de la Junta de Castilla y León en Burgos, Roberto Saiz y la propia Cristina Ayala han leído el manifiesto que ha redactado la Fundación Miguel Ángel Blanco y que recuerda los acontecimientos de aquellos días.
Fueron tres días de «angustia» en los que los españoles recordaron que tres secuestradores Javier García Gaztelu, Txapote, Irantzu Gallastegui y José Luis Geresta Mujika «secuestraron a Miguel Ángel Blanco a primera hora de la tarde de un 10 de julio de 1997, cuando iba a trabajar. Le retuvieron 48 horas y el 12 de julio lo sacaron de su escondite, lo llevaron a una zona boscosa de Lasarte (Guipúzcoa) y, maniatado, con los ojos vendados y de rodillas, «le dispararon dos tiros de calibre pequeño que le hirieron de muerte, permaneciendo con un hilo de vida durante 12 horas, hasta fallecer la madrugada del día 13».