Suelta de linces en Astudillo
Muere atropellado en Palencia el cuarto de los nueve linces liberados en Castilla y León
La Junta ha confirmado la muerte de otro de los nueve liberados en la comarca del Cerrato palentino, dentro del plan de recuperación de esta especie en la Comunidad
La Junta de Castilla y León ha confirmado la muerte, al parecer por atropello, de un cuarto lince de los nueve liberados en la comarca del Cerrato palentino, dentro del plan de recuperación de esta especie en Castilla y León que se inició el pasado mes de febrero.
Se trata de Venadillo, el lince procedente de Castilla-La Mancha que fue liberado en el Cerrato el pasado junio durante el primer traslado de un ejemplar entre comunidades autónomas que se produce en España dentro del programa para recuperar la especie, según ha confirmado a Efe la Consejería de Medio Ambiente.
Además se trataba de un animal que no había sido criado en cautividad, sino que era un macho de un año nacido en libertad y criado por su madre en el municipio de Guadalmez (Ciudad Real), en el occidente de Sierra Morena.
El animal ha sido encontrado muerto durante la mañana del 8 de diciembre en la carretera P-405, entre las localidades de Villajimena y Astudillo, al parecer atropellado por un vehículo.
El cuarto lince
Se trata del cuarto lince de este programa que ha sido hallado muerto durante los últimos meses después de uno ahogado en un canal y otros dos atropellados.
El 10 de agosto, agentes medioambientales de la Junta de Castilla y León, de la Guardia Civil y personal de la Confederación Hidrográfica del Duero (CHD) recogieron en el Canal de Villalaco, cerca de Venta de Baños (Palencia), los restos de 'Vuelvepiedras', que fue el primer macho soltado y que, como confirmó después la necropsia, había muerto ahogado.
Una semana antes había muerto atropellado otro de los ejemplares del proyecto, la hembra bautizada como 'Vouga' y hace un mes fue localizado otro ejemplar atropellado del que no trascendió información pública.
Estatus del lince en Castilla y León
El consejero de Medio Ambiente, Juan Carlos Suárez-Quiñones, ha asegurado este martes que la Junta de Castilla y León va a compensar estos accidentes con nuevas introducciones, con el convencimiento de que con el tiempo la población de linces ibéricos se va a asentar en Castilla y León.
«Sabíamos que había riesgos», ha reconocido el consejero al destacar la importancia de un programa que ha permitido devolver el lince a Castilla y León después de 50 años sin la especie, y que se está desarrollando siguiendo los patrones comunes de otras áreas de reintroducción, con pérdidas de ejemplares por mortalidad o dispersión que se suelen producir fundamentalmente en los primeros años del proyecto.
En este sentido, Suárez-Quiñones ha recordado que la comarca palentina donde se ha apostado por reintroducir la especie es la más adecuada y por tanto se va a continuar con el programa.
«Vamos a seguir, creemos que el lince se va a asentar en Castilla y León y esos riesgos de muerte se compensarán con nuevas reintroducciones hasta que la población críe y se asiente en la comunidad», ha reiterado.
