Ada Colau, durante un acto, el pasado mes de mayo
Cataluña
Colau impulsa la inmersión lingüística en plena ofensiva secesionista contra el español
El apoyo a comercios para que se utilice más el catalán o acciones con influencers en Secundaria son algunas de las propuestas que están sobre la mesa
Desde el Ayuntamiento de Barcelona también consideran que en la ciudad no se habla suficiente catalán. No solo eso, sino que, además, ha habido un retroceso en su uso. Y por este motivo va a impulsar medidas concretas para fomentar el uso de esta lengua. Y se deja claro que estas acciones «tienen como objetivo general generar motivación para utilizar el catalán como lengua habitual, promover los usos del catalán en todos los ámbitos de trabajo, así como promover la vinculación entre la lengua catalana y la identidad barcelonesa». Incidirán en ámbitos como la educación, la juventud y las actividades lúdicas, el deporte, la cultura, la empresa y el comercio, sanidad, acogida y la propia administración pública. Esta será la aportación del consistorio al Pacto Nacional por la Lengua, impulsado por la Generalitat para fomentar el uso del catalán.
¿Y cuáles son los datos con los que trabaja el ayuntamiento? Se extraen de la Encuesta de Usos Lingüísticos del 2018 y de la Encuesta a la Juventud del 2021. Según estos estudios, se ha detectado una reducción del porcentaje de hablantes iniciales de catalán, especialmente en la ciudad de Barcelona; un uso minoritario de esta lengua entre los jóvenes de la capital catalana, sobre todo en algunos distritos; y también se ha constatado que hay un segmento de población monolingüe en castellano: el 26 % no usa nunca el catalán y un 27 % lo utiliza poco. De ahí que el consistorio asegure que se observe un «debilitamiento del catalán en su función de elemento de cohesión social y como vehículo de pertenencia a la comunidad, con una pérdida del valor de ascenso que tradicionalmente ha tenido la lengua, así como un proceso de desconexión emocional en relación al catalán».
Medidas concretas
Yendo ya a las medidas concretas, y sobre el ámbito de la educación, se ha puesto sobre la mesa la visita de influencers a los centros educativos de secundaria para que puedan servir como «referente en el uso del catalán». También se prevé la puesta en marcha de Juegos Florales digitales, con concursos de memes o vídeos, con categorías por estilos, temas y edades. En este caso se contaría con la implicación de la televisión municipal.
En relación a la 'juventud, tiempo libre y deporte', se apuesta por llevar a cabo una campaña de «identificación de la ciudad de Barcelona con la lengua», tanto dentro del ámbito interno como a nivel internacional. O que, a partir de vídeos de Instagram, se fomente la vinculación del catalán con la identificación personal de los jóvenes. Y como no, también se cuenta con formación para que usen el catalán en los entrenamientos entrenadores de deportes y árbitros.
Este plan también cuenta con medidas específicas para el ámbito económico de la ciudad, para empresas y comercios. Aquí se contempla un paquete de apoyo a comercios para el uso del catalán, que incluirá cursos, o guías de conversaciones. Se impulsará además la campaña 'Bon dia tingui' (que tenga buen día) para fomentar el uso del catalán en comercios, bancos y mercados. También habrá cursos específicos para aquellas empresas que estén instaladas en Barcelona o se incorporará un pequeño vocabulario en catalán en las guías y folletos de bienvenida para el turismo.
En otro ámbito, en el de 'cultura, ciencia y universidades', se pretende aumentar la proyección de cine en catalán en Barcelona, ya sea a través de salas concertadas con la Administración, o bien incentivando la subtitulación y traducción al catalán. También se creará el 'Día de la lengua en Barcelona', se trabajará para recuperar la toponimia popular de la ciudad, «recogiendo los topónimos usados a través de la aportación ciudadana» o se ayudará a la divulgación científica en catalán a través de los programas de ciencia y de cultura del Ayuntamiento.
Otro de los aspectos del plan recoge un ámbito importante, como es el de la sanidad. Y en este caso habrá un programa de bienvenida para el personal médico que viene a trabajar a Barcelona, personal que venga del extranjero, y que incluye un curso «acelerado» de catalán. Y en relación a la inmigración, se continuarán impulsando cursos de catalán, además de que se fomentará el voluntariado lingüístico entre los trabajadores del Ayuntamiento de Barcelona.
Y también dentro de la propia administración se trabajará para ampliar el uso del catalán. Para ello se formará al personal de atención al público sobre los usos lingüísticos adecuados; se reforzará el servicio interno de formación lingüística en el personal del Ayuntamiento y también se «acompañará e informará a la ciudadanía sobre sus derechos lingüísticos».
El teniente de alcalde de Cultura, Jordi Martí, considera que las medidas quizás llegan tarde, teniendo en cuenta que en la ciudad se ha constatado un retroceso en el uso del catalán, pero confía en que el plan sirva de ejemplo a otros municipios. Para Martí, los éxitos iniciales de la normalización lingüística hacen pensar que era una «asignatura ya hecha» y ahora la situación es «urgente».
Parar la coordinadora del proyecto, Marta Rovira, hay un problema de «decalaje» entre el conocimiento del catalán, que es elevado, y su uso. Según ella, esta situación se debe a dos cuestiones fundamentales: que se haya pasado del 3 al 30 % de población extranjera, y que el ámbito digital y de las redes sociales está dominado por las grandes lenguas, como el español.
Comentarios
