Imagen de un comedor escolar
Cataluña
Vox denuncia que más del 80% de los centros de Sant Martí sirven menú Halal y ninguno especial en Cuaresma
El líder de la formación en Barcelona, Gonzalo de Oro, deja claro que no es que pretendan que haya un menú específico en Cuaresma, pero que «tampoco le demos un trato preferencial a otras culturas. O todos, o nadie»
El 80% de los colegios e institutos de titularidad pública del distrito de Sant Martí, en Barcelona, ofrece menú halal o sin cerdo, un menú pensado para los alumnos musulmanes. Son datos del Consorcio de Educación de la capital catalana y que recogen, en concreto, que de los 47 centros públicos que hay en el barrio, en 38 hay este menú. Sin embargo, ninguna escuela prepara un menú especial para Cuaresma, por poner un ejemplo.
Es la denuncia que hace Vox después de recibir la respuesta del Consorcio de Educación. El líder de la formación en Barcelona, Gonzalo de Oro, deja claro que no es que pretendan que haya un menú específico en Cuaresma, pero que «tampoco le demos un trato preferencial a otras culturas. O todos, o nadie», ha apostillado.
De Oro lamenta que, desde el Ayuntamiento, se está «renegando de nuestra religión y de nuestra cultura, que es lo que nos ha llevado hasta aquí», mientras que se hacen continuos «guiños» al Ramadán y al islamismo, «olvidando las raíces cristianas de nuestra ciudad y a los cristianos, a los que tiene abandonados». Y alerta que perder esa identidad puede llevar a Barcelona en particular y a Europa en general, «a convertirlas en lo que no queremos que sea».
En esa respuesta, el Consorcio de Educación también explica que son los consejos escolares de cada centro educativo los que acuerdan los menús que, «atendiendo a las demandas de las familias», ofrecen en sus comedores.
Y explica que existe una instrucción sobre diversidad alimentaria de los comedores escolares en los centros que gestiona este organismo, en el que se deja claro que «las empresas adjudicatarias de los servicios de comedor y las cocinas propias de los centros educativos tienen que garantizar la singularidad de menús que pidan las familias por motivos culturales, religiosos y las situaciones de régimen especial por prescripción médica». Del mismo modo, se apunta, estas peticiones específicas no pueden suponer «un encarecimiento del servicio».