Varias banderas 'esteladas' en la manifestación contra Mazón en ValenciaC. L.

La séptima manifestación por la dana en Valencia toca mínimos de asistencia entre banderas independentistas

A la marcha han asistido la Asociación Víctimas Mortales DANA 29-O y la Associació de Víctimes de DANA 29 octubre

Un mes más. Una manifestación contra Carlos Mazón más. Pero menos asistentes. Si las dos primeras manifestaciones contra el presidente de la Generalitat Valenciana fueron masivas y llenaron portadas, telediarios, tertulias y digitales, las sucesivas se vienen caracterizando por una participación que va menguando poco a poco, cada 30 días aproximadamente, hasta dejar estas concentraciones en un segundo peldaño.

Lo confirma la propia Delegación del Gobierno, que estima que a la protesta han acudido 15.000 personas. Este registro son 10.000 asistentes memos que en la marcha que tuvo lugar el pasado mes de abril, cuando acudieron 25.000, una cifra en la que, además, coincidieron no solo la rama del Ejecutivo central en la Comunidad, sino también el Ayuntamiento de Valencia a través de la Policía Local. El peor dato de todos. Este cuerpo rebaja lo ofrecido por el departamento de Pilar Bernabé hasta las 12.300 personas.

Una de las causas que pueden estar contribuyendo a esta situación es la obsesión de la izquierda en ideologizar las marchas para colocar su relato y a sus gentes mediante una colección sin fin de lemas y símbolos que se repiten y se ven hasta la saciedad. Entre los primeros, poca diferencia hay entre la primera protesta y la de este jueves: «Mazón dimisión», «asesinos», «criminales», «ni olvido ni perdón», «el president a Picasent» y tantos otros en la misma dirección. Reproches hacia Pedro Sánchez en particular o al Gobierno central, nada.

En cuanto a lo simbólico, se puede observar cómo desde la manifestación multitudinaria del pasado mes de noviembre hasta la séptima de este jueves ha ido en aumento, siempre portado con tanto orgullo como griterío y ceño fruncido por la izquierda. Sin ir más lejos, este día 29, la plaza del Ayuntamiento de Valencia bien ha podido parecer una mezcla en una queja ante la gestión de Mazón con la dana con la marcha del 1 de Mayo por el Día del Trabajador y, todo junto y al mismo tiempo, con una Diada independentista en Cataluña para reclamar la secesión.

Vista aérea de la manifestación contra Mazón en ValenciaC. L.

Y es que, entre pancartas contra el jefe del Consell, ha habido banderas 'esteladas', varios militantes de Arran, es decir, las juventudes de la CUP (no precisamente en actitud pacífica ni colaborando con la Policía Nacional). Pero también se han podido ver sin ningún problema enseñas de la Confederación General del Trabajo (CGT), del Partido Comunista de España (PCE), así como de otros sindicatos y colectivos de extrema izquierda. Por si no fuera suficiente, en esta macedonia ideológico-reivindicativa también han tenido su particular hueco asociaciones LGTBI. La justificación no puede ser más pintoresca: «Contra el Gobierno criminal, resistencia trans». Ninguna mención a las víctimas de la dana.

Con todo lo explicado, no es de extrañar que la solidaridad y el apoyo de la sociedad valenciana hacia los afectados sigan intactos pero que, a la vez, se esté distanciando de un movimiento que nació como una protesta legítima pero que mes a mes pudiera parecerse más a una asamblea de carácter partidista. En este sentido, cabe destacar que dos personas con carnet y ligadas a Compromís son caras visibles de dos asociaciones de víctimas.

Una es Mariló Gradolí, actual asesora de los nacionalistas en el Ayuntamiento de Catrarroja y presidenta de la Associació de Víctimes de la DANA 29 d'Octubre. El segundo es Manuel Cristian Lesaec, número seis de Compromís por Alfafar en las elecciones de 2019 y quinto puesto en las de 2023. El nacionalista es el presidente de la Asociación Damnificados DANA Horta Sud Valencia.