El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en un mitin en Galicia, la semana pasada
Comunidad Valenciana Sánchez dinamita la cordialidad institucional con Mazón: ni lo invita ni le informa de su visita a Torrevieja
El presidente de la Generalitat manifiesta su sorpresa al enterarse de que el líder del Ejecutivo acude a una planta desalinizadora sin informarle
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha elegido el día de san Valentín para poner fin a la relación de «cordialidad institucional» entre el Ejecutivo nacional y el de la Generalitat Valenciana.
El idilio acordado el pasado 18 de enero entre la delegada del Gobierno en la región, Pilar Bernabé, y el presidente autonómico, Carlos Mazón, ha durado menos de un mes. Lo que ha tardado Sánchez en aparecer por tierras valencianas y no invitar al dirigente autonómico a un acto que podría haber sido conjunto.
El también secretario general del PSOE acude a una planta desalinizadora en Torrevieja (Alicante) en medio de la medida no exenta de polémica de trasladar agua desde la localidad valenciana de Sagunto a Barcelona en barco. Un plan al que, por solidaridad con sus vecinos del norte, Mazón dio el visto bueno, evitando alimentar una controversia con Moncloa y con el Gobierno catalán. Sin embargo, las buenas intenciones no han sido, en absoluto, correspondidas.
«No me consta que el presidente Sánchez nos haya informado de su visita a Torrevieja. Ni ha requerido nuestra presencia ni nos ha informado de cuál es el objeto de su visita», se resignaba este miércoles el político alicantino del PP, quien añadía que «poco» podía «alegar». «Me hubiera gustado haberlo sabido o incluso haberle podido acompañar, pero no ha sido así», lamentaba.
Un desencuentro que, este miércoles, quedaba plasmado en las agendas de ambos presidentes. Mientras a las 11 Sánchez «visita las instalaciones de la planta desaladora de Acuamed, en Torrevieja», Mazón «se reúne con la presidenta de la Federación de Entidades Culturales Andaluzas en la Comunitat Valenciana (FECACV), Puri Torres».
Reunión con Ribera el lunes
Pero no todos los puentes están rotos entre Madrid y Valencia, pese a que desde Moncloa se afanan en intentarlo de distintas maneras. Como ayer mismo, cuando el ministro de Transportes, quien hace escasos meses dejaba un manto de flores sobre el lecho valenciano en forma de visto bueno a la ampliación de la terminal norte del Puerto de Valencia, abría un frente con la alcaldesa de la ciudad del Turia, la también 'popular' María José Catalá, a quien acusaba de haber eliminado un carril bici.
El próximo lunes Mazón se reunirá con la vicepresidenta y ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, para abordar asuntos como el estado actual del trasvase Tajo-Segura, un tema en el que el Gobierno regional acusa al central de aplicar criterios políticos y no técnicos. El presidente de la Generalitat lleva esperando esa reunión «toda la vida», según apuntaba este martes. Unas palabras que quizás no sirvan para que se aplique ese dicho de que «dos no se pelean si uno no quiere».
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