Un agente de la Guardia Civil, evitando el suicidio de una chica de 20 años en Picassent (Valencia)
Valencia La actuación heroica de un guardia civil en Picassent evita que una chica se suicide
La joven, de 20 años, amenazaba con saltar desde un primer piso y se estaba autolesionando con un cuchillo cuando el agente logró reducirla tras un rápido salto al balcón en el que se encontraba
Los vecinos de la localidad valenciana de Picassent vivieron este martes una escena límite y cargada de tensión pero que, afortunadamente, tuvo un desenlace feliz. Alrededor de las 12 horas, en el balcón del primer piso de un edificio una chica de 20 años amenazaba con suicidarse. Por suerte, un agente de la Guardia Civil pudo evitar prácticamente en el último instante que lo llegara a hacer.
La Benemérita recibió un aviso telefónico alertando de que una joven se encontraba en una terraza y amenazaba con lanzarse desde ahí a la calle. Al instante, ocho miembros del Cuerpo se desplazaron hasta el inmueble en cuestión, del que les separaban apenas 100 metros hasta el cuartel. Allí mismo también contaron con la colaboración de cuatro policías locales.
Cuando todos ellos llegaron donde estaba la chica, vieron cómo diversos vecinos estaban colocando colchones en la acera y bajaron unas sábanas que estiraron con tal de amortiguar el golpe que la joven tendría en caso de que finalmente decidiera saltar desde el balcón. Al mismo tiempo, varios agentes subieron hasta el primer piso en aras de intentar dialogar con ella y convencerla de que no se suicidara.
Aprovechó una distracción
Ajena a cualquier tipo de recomendación y lejos de atender a los llamamientos para que volviera al piso, comenzó a autolesionarse, haciéndose cortes en los brazos con un arma blanca que portaba. En esos tensos instantes, un guardia civil consiguió por unos momentos distraer a la chica, con lo que aprovechó para acceder inmediatamente al balcón en el que se encontraba, agarrándole del brazo para arrebatarle el cuchillo y bajarla de la barandilla. La maniobra no resultó sencilla debido a que la joven forcejeó con su salvador, de nombre Jesús Alcañiz.
El peligro fue tal que siguió intentado lanzarse al vació, pero de nuevo el agente lo impidió mediante un rápido abrazo para terminar reduciéndola sin que ya opusiera resistencia y meterla en el inmueble. Hasta la finca acudió un equipo médico para atender a la chica, quien antes de que la Guardia Civil diera por finalizado el dispositivo, abrazó a Alcañiz y le dio las gracias.
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