El exalcalde de Gandía estaba siendo investigado por una presunta estafa de aceite de oliva de Tanzania

Los investigadores de homicidios de la Guardia Civil de Valencia están peinando todo el entorno de Arturo Torró, exalcalde de Gandía. Fue asesinado el pasado miércoles 19 de febrero de un tiro en el pecho con una pistola de pequeño calibre. El cuerpo lo encontró su propia mujer pasadas las 22:30 horas. Estaba tirado en la cuneta de la carretera A-38 de la comunidad.

Fruto de esas pesquisas, los encargados de la investigación habrían averiguado que Torró estaba siendo investigado por estafa. Presuntamente había prometido a una serie de inversores extranjeros que iba a traer gran cantidad de aceite de oliva de Tanzania a un precio muy competitivo. Los inversores confiaron en él e invirtieron una buena cantidad de dinero.

El problema es que ese aceite, que tenía que llegar al puerto de Valencia en barco, jamás apareció. Según la denuncia, Arturo Torró comenzó a dar excusas y finalmente los inversores decidieron poner una querella contra él acusado de estafa.

Estos días se ha sabido que durante un reciente viaje a África habría sufrido un intento de apuñalamiento. Se habría librado porque llevaba puesto un chaleco antibalas, comentan personas de su entorno. Los guardias creen que ese viaje estaba vinculado a la presunta estafa del aceite de oliva de Tanzania: por eso están tratando de localizar a los inversores denunciantes para tomarles declaración.

Otras hipótesis

Sin duda es una línea de trabajo que deben trabajar, pero hay muchas otras. Tampoco se descarta que fuese un robo en plena carretera y que unos ladrones al ver el vehículo y los collares de oro que llevaba puestos hubiesen querido darle un palo.

De momento, la hipótesis del ajuste de cuentas es la opción que más fuerza tiene, pero se verá con el tiempo si va adquiriendo forma o si encuentran otros móviles potenciales del crimen.