Qué comer en este rincón de Lugo, considerado el mejor para disfrutar de la gastronomía gallega

Cuando se piensa en destinos gastronómicos de España, Galicia lidera todas las listas para deleitar al estómago con las mejores materias primas. Hay mil y un sitios que son parada obligatoria en la comunidad de autónoma, pero hay un municipio que destaca sobre los demás.

Se trata de Sober, situado al sur de la provincia de Lugo y en el corazón de la Ribeira Sacra. Es sinónimo del buen comer y buen beber, y «se ha ganado a pulso la fama de tener algunos de los mejores bares y tabernas de la región», tal y como señalaba la revista Viajar. Comer bien en esta región no es ninguna opción, más bien una obligación gracias a sus productos de proximidad local y al trato exquisito a la hora de preparar las materias primas.

El restaurante Berso es uno de los emblemas del municipio de Sober. Aúna producto fresco con verduras y hortalizas ecológicas cultivadas en la huerta del propio restaurante y sus productos, como se puede leer en su página web, son elegidos por su «sencillez, sabor y calidad». Entre sus especialidades se encuentran las zamburiñas al horno, los chipirones salteados con pisto de la huerta, jamón y alioli, el tournedo de bonito del norte o la ternera a la parilla y castañas salteadas con setas, entre otras.

O Castelo, A Cantina dos meus avós y la parrillada Regato son otros restaurantes que no te puedes perder si visitas este lugar único. El vino también forma parte de sus encantos con un total de 29 bodegas en toda la región. Como la de Amandi, de la Denominación de Origen Ribeira Sacra.

El paraíso para los amantes de las rutas

Sober es mucho más que gastronomía porque también conjuga naturaleza e historia. Conserva vestigios que datan del Neolítico hasta la Edad de Bronce. En sus 133,35 kilómetros cuadrados destacan además varios miradores que merece la pena visitar. Desde el de Soutacho se otean las impresionantes vistas del cañón del Sil mientras que desde el mirador a Pena do Conde se aprecia el monasterio de Santo Estevo de Rivas de Sil, una joya del románico gallego del siglo X. Sin olvidarse del mirador de A Cavidade, perfecto para ver el monasterio de Santa Cristina de Ribas de Sil.

Sober es también tierra de tradición alfarera y el paraíso para los amantes de las rutas. Cuenta con una amplia red sobre la que poder contemplar todos los paisajes del municipio, destacando la ruta del Cañón de Sil.

Tierra de centenarios

No es de extrañar que este paraíso sea lugar de centenarios. Es conocido por ser el hogar de la abuela de Galicia. Vivió Lola González, que falleció a los 111 años. Era la mujer más longeva de la comunidad autónoma. No es la única. Actualmente son diez los que sobrepasan el siglo en Sober.