Viaje comunista a ninguna parte
Esta panda de irresponsables políticos, además de ejercer un acto de hipocresía infinito, han mentido hasta la extenuación
Parece ser que algunos miembros cordobeses de Izquierda Unida (SUMAR) se han ido al Parlamento Europeo, dándose el gusto de parafrasear a Machado en aquello de ´caminante no hay camino, se hace camino al viajar´ o quizás a Descartes con lo de ´viajo, luego existo´.
Muy flamencos ellos, se han ido para tierras flamencas, valga la redundancia, para decirle al mundo que en el norte de Córdoba tenemos un agua contaminada y tóxica, que es lo mismo que decir que nadie venga a nuestra tierra y que todo lo que aquí se produce es peligroso. Nada más falso y temerario que asociar agua tóxica con nuestro territorio, cuando el agua que llega a nuestros grifos solamente no cumple con un parámetro (Carbono Orgánico Total) que impide su calificación como potable. Ese parámetro antes de enero de 2023 no se medía para calificar la potabilidad de las aguas y no tiene incidencia directa sobre la salud, según informes técnicos contrastados.
Esta panda de irresponsables políticos, además de ejercer un acto de hipocresía infinito, han mentido hasta la extenuación con tal de seguir el plan que tienen trazado para atacar a los gobiernos del PP y acabar a la vez con un sector agroganadero que, si de algo es responsable, es de producir alimentos de una calidad extraordinaria dando vida a un territorio por el que los gobiernos de izquierdas no han hecho nada más que poner piedras en el camino de su supervivencia.
Comunistas viajeros por Europa, aunque no se planteasen ningún viaje de protesta a Córdoba o a Sevilla cuando ellos tenían responsabilidades de gobierno, con lo cerquita que están. Ahora tampoco sienten la necesidad de ir a Madrid para reclamar soluciones a su jefa de filas. Bendita y acogedora Europa. Bien les podían haber contado algo de las fresas marroquíes contaminadas de hepatitis A.
Afirma el clan inquieto que «las directivas europeas son de obligado cumplimiento» y acusan de inacción a Junta de Andalucía y la Diputación de Córdoba en el problema del agua. Pero no especifican que esta inacción fue con los gobiernos socialcomunistas, porque desde que el PP gobierna en ambas administraciones se están destinando más de cincuenta millones de euros para solucionar los problemas de agua ocasionados por esa inacción de IU y PSOE durante más de quince años.
También se les ha olvidado contarles a las autoridades europeas que las directivas de obligado cumplimiento en el sector agrario y la depuración de aguas residuales han sido retomadas por el Gobierno de Juanma Moreno tras el olvido ejercido durante muchos años por la izquierda andaluza, y que quien no cumple con esas directivas, ni con las leyes españolas es el Gobierno de Sánchez y Yolanda.
Sin embargo, esas inversiones que el PP está llevando a cabo las han calificado los turistas de IU como «chapuzas con las que se tira el dinero público a la basura», obviando decir que es el Gobierno socialcomunista de España, en el que su partido desgobierna en aparcería con el partido socialista, es quien ha tirado el dinero público por no hacer la conexión de Puente Nuevo-Sierra Boyera tal y como habían solicitado en 2021 sus propios técnicos, para hacer una conexión provisional Colada-Sierra Boyera a sabiendas de que esa conexión (la definitiva) ya la tenía aprobada y presupuestada la Junta de Andalucía.
Más grave aún es que esa decisión la tomaron sabiendo que el agua del embalse de La Colada no tenía la calidad suficiente para poder potabilizarse y de juzgado de guardia es saber que tal decisión la tomaron simplemente para generar un enfrentamiento político ante la inminencia de las elecciones andaluzas, sin preocuparle en absoluto la posibilidad que existía de llegar al desabastecimiento. Una posibilidad que se ha concretado en once meses sin agua potable para 80.000 personas. Por tanto, están totalmente desautorizados para erigirse en defensores de la ciudadanía porque simplemente forman parte del tribunal que ha condenado a esa ciudadanía de las comarcas de Pedroches y Guadiato a una situación lamentable y anacrónica.
Como en la obra de Fernán Gómez Viaje a ninguna parte, esta compañía de teatro comunista se ha ido al centro político de Europa a escenificar su obra, pero no una comedia, sino un esperpento cargado sobre la tragedia de una población que garrafa en mano percibe lo poco que importa a un Gobierno anclado en su autoamnistía y en justificar como las prácticas corruptas en su seno han llenado de millones de euros determinados bolsillos. Solo con un poquito de lo saqueado con las mascarillas inservibles, el problema del agua en el norte de Córdoba estaría resuelto.
Por tanto, si el clan viajero de SUMAR no quiere restar, ya puede regresar a la sede europea para pedirles que vigilen al Gobierno de España en el cumplimiento de sus obligaciones. Igualmente, no estarían mal unas disculpas con los ciudadanos de esta tierra por el mucho lastre que le han echado con mentiras y falsedades. Que dejen en paz al colectivo agroganadero y de paso le recomienden a su lideresa que proponga en el Consejo de Ministros la conexión con Puente Nuevo. Creo que igualmente sumarían si le recomiendan que no dé más sobresaltos al sector hostelero, y si lo tiene a bien, que nos informe sobre el número de fijos discontinuos que tiene este país.
Bartolomé Madrid Olmo es Diputado en el Congreso y Alcalde de Añora
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