
Es escudo gigante que se esconde en las calles de Madrid
El escudo gigante del Atlético de Madrid que se esconde entre las calles de la capital
El club ha tenido dos campos y dos estadios que preceden al actual Riyadh Air Metropolitano
Hay secretos en Madrid de tamaño colosal, uno de ellos es el escudo del Atlético de Madrid que se esconde entre las calles de la capital. Este enigma solo se puede resolver desde las alturas y ocupa toda la manzana. En este lugar se encontraba el tercer campo y primer estadio del club colchonero, detrás del Campo del Retiro y el de O'Donnell.
El Metropolitano, construido en 1920, fue el primer estadio del Atlético de Madrid colchonero en el que jugó más de 500 partidos y marcaron casi 1500 goles.
Pero tanto el equipo como la ciudad crecieron y el estadio se les quedó pequeño, por lo que en los años 60 se mudarán al Calderón del Antiguo Metropolitano.
En la actualidad, solo queda el recuerdo y el nombre que heredó la torre que hoy se encuentra donde estuvo el campo. Si alguien quiere venir a visitar el que fue el tercer templo del Atleti, no tiene más que ir a la plaza Ciudad de Viana, en la Ciudad Universitaria.
El Atlético de Madrid ha tenido dos campos y dos estadios que preceden al actual Riyadh Air Metropolitano. El primero de ellos fue el Campo del Retiro (1903-1913), en un solar situado detrás de las tapias del parque.
Conocido como el «campo de la rana», se ubicó el primer campo de fútbol del Athletic Club de Madrid, donde el 2 de mayo de 1903 se organizó un partido entre sus socios.
La implicación de estos primeros miembros del equipo era de tal magnitud que hasta el terreno de juego era alisado por ellos mismos, al igual que debían pintar las líneas del campo y fijar las porterías.
En estos terrenos no sólo se practicaba el nuevo deporte sino que también en ocasiones se utilizaba como espacio de instrucción militar.

Campo del Retiro del Atlético de Madrid
El segundo campo del Atleti fue el Campo de O'Donnell (1913-1923). La creciente asistencia de aficionados para presenciar los encuentros de fútbol originó la obligación de construir un nuevo campo, en esta ocasión vallado, para poder cobrar entrada.
En la mañana de 9 de Febrero de 1913, se inauguró el campo de O'Donnell disputándose un encuentro entre el Athletic Club de Madrid y el de Bilbao, con unos 10.000 espectadores.
El nuevo terreno de juego se convirtió en uno de los mejores de la capital de España, hasta tal punto que en el año 1921 se disputó el primer partido internacional en Madrid, entre Portugal y España.
En 1923 llegó José María Otamendi, uno de los promotores de la compañía del Metropolitano Alfonso XIII, que emprendió la proeza de dotar a Madrid de un gran recinto para albergar encuentros de fútbol.

Campo de O'Donnell del Atlético de Madrid
El 13 de mayo de 1923, ocupando el palco de honor en representación de la familia real española, la Reina Doña María Cristina, madre de Alfonso XIII, y realizando el saque de honor el Infante Juan de Borbón, se celebró el acto oficial de inauguración del estadio.
20.000 personas presenciaron un partido entre los equipos del Athletic Club de Madrid y la Real Sociedad, el encuentro se saldó con la victoria del conjunto rojiblanco por 2-1.
La configuración arquitectónica del estadio, junto con su magnífico emplazamiento, pronto fue digno de admiración. En la zona del fondo de unas de las porterías, aprovechando la peculiaridad del terreno que formaba un anfiteatro natural, se cimentó la famosa y espectacular «gradona».
Desde este punto se accedía al campo a una altura de 16 metros sobre el nivel del mismo, observando una perfecta visión cenital del Stadium, que provocaba una impresión maravillosa.

Campo Metropolitano del Atlético de Madrid
Construcción del Calderón
A finales de los años 50, el Estadio Metropolitano se quedó pequeño para acoger a los numerosos espectadores que acudían a todos los partidos.
Las instalaciones eran insuficientes para responder a los retos del futuro y las exigencias del público, entre ellas ampliar las localidades.
Impulsado por el presidente en ese momento, Javier Barroso, se presentó un proyecto de nuevo estadio para cubrir esas necesidades, tanto deportivas como institucionales. Para ello, se adquirieron unos terrenos a orillas del rio Manzanares.

Estadio Vicente Calderón
El 2 de octubre de 1966, bajo la presidencia de Vicente Calderón y culminando la obra de su antecesor, fue inaugurado el Estadio del Manzanares con el encuentro de Liga entre el Atlético de Madrid y Valencia C.F.
En reconocimiento a la gestión desempeñada por su presidente, el estadio cambia de nombre y pasa a llamarse Estadio Vicente Calderón desde el 14 de julio de 1971.
El último partido de competición oficial que el equipo disputaría en la orilla del Manzanares sería contra el Athletic Club (3-1). La victoria dio paso a un sentido homenaje al estadio.
La flamante nueva casa de todos los atléticos se estrenaba el 16 se septiembre de 2017 con una victoria ante el Málaga (1-0). Antoine Griezmann sería el primer goleador del Riyadh Air Metropolitano.