El vehículo elegido se ha adaptado como coche fúnebre

El vehículo elegido se ha adaptado como coche fúnebre

El extraño coche en el que han llevado el féretro del Papa

El anagrama de la marca elegida, una cabra, fue cuidadosamente tapado con el escudo vaticano

Hasta última hora ha sido una completa incógnita saber el vehículo en el que llevarían al Papa durante su último trayecto desde San Pedro del Vaticano hasta la basílica de Santa María la Mayor. El papamóvil elegido ha sido uno que Francisco utilizó en uno de sus viajes a Oriente, según ha confirmado la Oficina de Prensa vaticana, y para esta ocasión el coche ha sido adaptado para poder llevar sobre una plataforma el ataúd. A eso de las 12:15 horas se desvelaba la incógnita, como no podía ser de otra forma: un coche del grupo italo-frances Stellantis, empresa dirigida por John Elkann.

El grupo automovilístico es propietario entre otras del gigante norteamericano Chrysler, que cuenta entre sus marcas con Dodge.

Durante la ceremonia, los coches italianos han tenido total protagonismo, con Alfa, Fiat y Lancia como protagonistas absolutos. Hay que tener en cuenta que las marcas italianas de Stellantis no tienen ningún vehículo adaptado para llevar el féretro del Papa, por lo que se han visto obligados a recurrir a un pick up de la marca Dodge. En concreto se trata de un Dodge RAM 3500 pintado de riguroso blanco.

El imponente modelo escogido para la ocasión

Los pick up son los vehículos más vendidos en los Estados Unidos, coches mayoritariamente de trabajo, en los que son especialistas todas las marcas norteamericanas.

En redes sociales se pueden leer crítica respecto a si un pick up era el coche ideal para el traslado a la basílica de Santa María la Mayor, pero en estos casos y más aún hablando de un grupo italiano, la imagen y los detalles cuentan, y nadie habría entendido que llevarán al Santo Padre en un Mercedes, como se esperaba

El icónico emblema de la marca de automóviles

Lógicamente los responsables del parque se habían encargado de sustituir los anagramas de la marca, en este caso, la cabeza de una cabra, por el escudo del Vaticano.