Una correcta alimentación puede mejorar la circulación sanguínea en personas mayores
Alimentos que ayudan a mejorar la circulación sanguínea a partir de los 60 años
Más de 10 millones de personas sufren enfermedades y patologías relacionadas con el corazón
La circulación sanguínea es un proceso crucial para el buen funcionamiento del cuerpo humano, ya que permite que los órganos y tejidos reciban los nutrientes y el oxígeno que necesitan para realizar sus funciones. No obstante, a medida que el cuerpo envejece, el sistema circulatorio empieza a deteriorarse, lo que puede llevar a la aparición de enfermedades cardiovasculares.
Las enfermedades cardiovasculares suponen la primera causa de muerte en España. De hecho, según datos del INE, en España más de 10 millones de personas sufren enfermedades y patologías relacionadas con el corazón, de las cuales más de 120.000 personas fallecen cada año.
«El envejecimiento puede afectar a la circulación sanguínea sobremanera trayendo consigo graves consecuencias para la salud como las enfermedades cardiovasculares, insuficiencia venosa, o problemas cognitivos. Por ello, es clave que la población mayor acuda de manera regular a revisiones médicas, ya sea de manera presencial o a través de videoconsulta, para detectar cualquier problema circulatorio. Además, es aconsejable que realicen ejercicio diariamente, no fumen y controlen tanto la presión arterial como los niveles de colesterol con el objetivo de garantizar una buena calidad de vida», explica David Curto, director Médico, Calidad e Innovación de Sanitas Mayores.
Alimentos para mejorar la circulación
Ante esta situación, Sanitas Mayores ha preparado un listado con los alimentos que pueden mejorar la circulación sanguínea en personas mayores:
- Frutas y verduras: frutas cítricas como las naranjas, limones o pomelos y verduras como las espinacas o el brócoli son ricas en antioxidantes y vitaminas C y E, ideales para disminuir el riesgo de enfermedades circulatorias.
- Pescados: el salmón, el atún, la caballa o las sardinas son alimentos ricos en ácidos grasos omega-3 que limitan la formación de coágulos al mismo tiempo que conservan los vasos sanguíneos saludables.
- Frutos secos: nueces, almendras, pistachos, semillas de chía y de lino, entre otros, son productos ricos en grasas saludables, omega-3 y omega-6, así como vitamina E, que posibilitan una mejor circulación sanguínea.
- Legumbres: tanto las lentejas como los garbanzos o las judías son ricas en fibra, proteínas y hierro, lo cual permite mejorar la circulación sanguínea al reducir los niveles de colesterol.
- Cacao: rico en flavonoides, coopera en la dilatación de los vasos sanguíneos, mejora el flujo sanguíneo y mitiga la presión arterial. Aunque se debe consumir con moderación debido a su contenido calórico, el chocolate negro con alto contenido de cacao puede ser una buena opción para obtener estos beneficios.
- Bayas: al igual que las fresas, los arándanos o las frambuesas, son ricas en antioxidantes, que contribuyen a reducir la inflamación y promover una circulación sanguínea saludable.
En último lugar, cabe destacar que se debe consultar a un profesional de la salud antes de hacer cambios significativos en la dieta, especialmente aquellos mayores que tengan condiciones de salud preexistentes o estén tomando algún tipo de medicamento.
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