Una nutricionista explica cómo elegir un jamón envasado de calidad

En sándwiches, bocadillos o en una tostada, el jamón cocido es uno de los derivados cárnicos más consumidos en España. Además, suele decirse que el jamón, junto al pavo, es uno de los embutidos más saludables del mercado pero, ¿en qué debemos fijarnos para escoger el mejor producto? Blanca García-Orea, conocida en redes sociales como Blancanutri explica en sus redes sociales la importancia de leer las etiquetas y qué aditivos se deben evitar a la hora de comprar jamón.

En primer lugar la experta aconseja evita los nitritos, «a veces puedes encontrarlos con la palabra nitrito sódico o e249-e252, son unos aditivos que pueden aumentar la inflamación intestinal y que además son considerados como sustancias con potencial cancerígeno». Otro de los aditivos a evitar es el E407 carragenanos «que pueden causar también inflamación intestinal» y añade: «Todos los fosfatos E451 como el trifosfato sódico en grandes dosis puede provocar problemas digestivos y de hiperactividad».

Respecto al azúcar, Blancanutri afirma que no hay que preocuparse porque «normalmente está en una cantidad muy pequeña, menor a 1g por cada 100g y actúa como conservante y no hay ni que tenerlo en cuenta».

Lacón, jamón cocido o paleta

En los lineales de los supermercados, es posible ver mezclados productos muy diferentes entre sí y de calidad diversa. La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), explica que en función de la parte del cerdo empleada y de cómo se preparan, podemos distinguir los siguientes productos que, a menudo, son confundidos por los consumidores:

• Lacón. Es elaborado a partir de piezas enteras de las extremidades delanteras del cerdo que se cuecen y, a veces, se ahúman.
• Jamón cocido. Es elaborado con trozos de carne procedentes del despiece de las patas traseras del cerdo. Aquí se puede encontrar jamón cocido de categoría extra. Tiene una calidad mayor y no se le permite llevar almidones ni proteínas añadidas (lácteas o vegetales), y el contenido en azúcar está limitado. El jamón cocido, pueden contener hasta un 1 % de proteínas añadidas y un mayor contenido en azúcares mientras que el fiambre es la categoría más baja, a la cual se le permite llevar almidones.
• Paleta cocida. Similar al jamón cocido, pero usando la carne de las patas delanteras.

Así, a la hora de elegir el mejor jamón cocido, debemos cerciorarnos de que es jamón cocido de categoría extra, donde el porcentaje de carne varía entre el 82 % y el 97 %. En un fiambre este porcentaje puede bajar hasta el 50 %.