Los problemas de ansiedad han aumentado entre los jóvenes
El curioso experimento que demuestra que la ansiedad perjudica el aprendizaje
El estrés interfiere con el aprendizaje espacial y la capacidad de reconocer amenazas
Un episodio breve de ansiedad puede influir significativamente en la capacidad de una persona para aprender a diferenciar entre lo que es seguro y lo que representa una amenaza. Así lo demuestra una investigación publicada en NPJ Science of Learning, donde se utilizó un juego de realidad virtual en el que los participantes recolectaban flores. Algunas flores estaban acompañadas de abejas que «picaban» mediante una leve estimulación eléctrica en la mano, simulando una experiencia negativa.
La investigación se realizó con 70 participantes neurotípicos, de entre 20 y 30 años. Claire Marino, asistente de investigación en el Laboratorio ZVR, y Pavel Rjabtsenkov, estudiante de posgrado en Neurociencia en la Facultad de Medicina y Odontología de la Universidad de Rochester, fueron los primeros coautores del trabajo. Descubrieron que quienes lograron identificar correctamente las zonas seguras y peligrosas dentro del entorno virtual mostraban una memoria espacial más sólida y niveles de ansiedad más bajos. En cambio, los participantes que no distinguieron entre las diferentes áreas experimentaron mayor ansiedad y miedo, incluso en zonas que eran seguras.
Trastorno de estrés postraumático
Un hallazgo clave fue que los episodios momentáneos de ansiedad tuvieron un impacto más fuerte en el aprendizaje que la predisposición general de una persona a sentirse ansiosa.
«El estudio nos da pistas sobre por qué algunas personas desarrollan trastornos de ansiedad como el trastorno de estrés postraumático (TEPT), que dificulta reconocer cuándo una situación es realmente segura o peligrosa», explicó el Dr. Benjamin Suárez-Jiménez, autor principal y profesor asociado de Neurociencia y del Centro de Ciencias Visuales en el Instituto de Neurociencia Del Monte de la Universidad de Rochester quien añade: «Nuestros resultados indican que la ansiedad intensa interfiere con el aprendizaje espacial y la capacidad de reconocer amenazas, lo que podría generar respuestas de miedo persistentes. Comprender estos procesos puede ser clave para mejorar los tratamientos para la ansiedad y otros trastornos relacionados con el estrés».
Suárez-Jiménez también destacó la importancia de investigar si personas con trastornos de ansiedad o estrés muestran alteraciones similares en su memoria espacial. Además, propuso que incluir herramientas como el seguimiento ocular en futuras investigaciones podría ayudar a evaluar cómo la atención a posibles amenazas influye en la percepción del entorno.
