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Animales

Estos cinco animales son capaces de oler y detectar enfermedades

No solo los perros son capaces de detectar enfermedades gracias a su desarrollado olfato

En ocasiones, menospreciamos las capacidades de los animales que viven en nuestro entorno. No obstante, varias investigaciones apuntan a que existen diferentes seres vivos capaces de ayudarnos a detectar enfermedades que aquejan a los humanos solo gracias a sus desarrollados sentidos.
En este texto recogemos cinco animales destacados por National Geographic que son capaces de contribuir en la lucha de enfermedades como el cáncer, el párkinson o incluso la COVID-19:

Las hormigas

HormigasGTRES

Una investigación de la Universidad de La Sorbona en París, Francia, publicada este 2023 en Proceedings of the Royal Society, señala que la hormiga sedosa, Formica Fusca, una especie común que se encuentra en toda Europa, es capaz de aprender a distinguir entre el olor de la orina procedente de ratones portadores de tumores de cáncer de mama humano y el de ratones sanos.
Según explica el estudio, las hormigas son capaces de percibir con su olfato compuestos orgánicos volátiles que pueden verse alterados por distintas enfermedades.
Tal y como explica una de las autoras del estudio Patrizia d'Ettorre, etóloga de la Universidad parisina, el olor es la principal forma de comunicación de esta especie. «Reconocen a los miembros del grupo al detectar su olor corporal» y usan feromonas, a menudo en pequeñas concentraciones, para comunicarse como una asombrosa variedad de señales complejas.

Los perros

Perro de la raza border collie.Pixabay

Una de las grandes cualidades del mejor amigo del hombre es, sin duda, su increíble olfato. Por ello, estos animales llevan años siendo entrenados para detectar varios tipos de cáncer, como el melanoma, los cánceres de mama y los gastrointestinales, así como algunas enfermedades infecciosas, como la malaria y el Parkinson.
Del mismo modo, con la pandemia de la COVID-19, Estados Unidos utilizó perros para descubrir nuevos casos de infectados con este virus procedente de China.
Sin embargo, todavía no está claro cómo responden ante las células cancerosas. Por ejemplo, un estudio sobre el cáncer ovario pudo comprobar que diferentes perros respondían a fragmentos diferentes, lo que puede indicar a que perciben más de un olor o, que dependiendo de la raza o sus capacidades, son capaces de oler elementos distintos.

La rata gigante africana

Rata gigante africanaWikimedia Commons

En 2004, la organización belga sin fines de lucho APOPO comenzó a utilizar ratas gigantes africanas entrenadas en Mozambique para detectar explosivos. Desde entonces, estos roedores han contribuido a liberar a siete países de más de 150.000 minas terrestres.
Sin embargo, parece que el olfato de estos animales no sirve únicamente para detectar explosivos.
Tanzania, donde tiene su sede APOPO, es uno de los 30 países con tasas más altas de tuberculosis, por lo que empezó a comprobarse si las ratas gigantes africanas también podrían ayudar a reducir los índices de esta enfermedad en dicho territorio.
Según las investigaciones de la organización, estos roedores pueden distinguir olores específicos del Mycobacterium tuberculosis, la bacteria que causa la tuberculosis. APOPO asegura que desde el inicio del programa, las ratas han detectado más de 23.000 casos pasados por alto por las clínicas de salud locales.

Las abejas

Una abeja poliniza una florGTRES

En abril de 2022 un grupo de investigadores holandeses demostró que las abejas pueden ser muy buenas a la hora de detectar el SARS-CoV-2, el virus que causa la COVID-19, gracias a su desarrollado olfato.
Al igual que las hormigas, estos insectos son capaces de detectar olores con sus antenas de forma muy precisa. En el estudio utilizaron un refuerzo positivo para que las abejas sacaran la lengua cuando estuvieran en contracto con materiales positivos de SARS-CoV-2 (una golosina azucarada. No obstante, con el paso del tiempo, este refuerzo dejó de ser necesario.
Con todo, todavía se desconoce qué huelen exactamente las abejas.

Los gusanos

Caenorhabditis elegansWikimedia Commons

Otro ser vivo capaz de ayudar en la detección de algunas enfermedades es el Caenorhabditis elegans, un minúsculo gusano cuyo tamaño no supera el de un grano de arena y que se utiliza comúnmente en la investigación de laboratorio al poseer ciertas características génicas similares a las humanas.
Varios estudios han demostrado que este organismo es capaz de detectar diferentes tipos de cáncer. En concreto, un estudio japonés demostró que es capaz de detectar células cancerígenas en el páncreas y otro italiano que es capaz de reconocer tumores de mama.