Un fotograma de la película documental 'Kirac', protagonizada por Michel Houellebecq
La polémica de Houellebecq y la grabación de sus encuentros sexuales (que ahora quiere eliminar)
El famoso escritor francés permitió que le grabaran manteniendo relaciones sexuales en Ámsterdam. La película, Kirac 27, se estrena el 11 de marzo, pero ahora él quiere prohibirla
«Se acercaba el final de año y, como siempre, detestaba la llegada de las fiestas. Mucho más porque marcarían el nacimiento de mi segundo hijo, y soy poco apto para el papel tradicional de padre alegre. La única persona menos emocionada por la Navidad que yo era el celebrado escritor Michel Houellebecq».
Así comienza la voz en off de Stefan Ruitenbeek, director del proyecto KIRAC (acrónimo de «Keeping it real art critics», que se puede traducir como «críticos de arte realistas»), en el tráiler de su proyecto número 27, titulado Kirac 27. Cuando la voz nombra al autor de Sumisión, el plano se centra en un Michel Houellebecq semidesnudo, despeinado, desorientado y con lágrimas en los ojos, mirando a cámara.
«Me había estado escribiendo con él vía correo electrónico. Me había contado que el viaje de novios que había planeado a Marruecos había sido cancelado por su temor a ser secuestrado por extremistas musulmanes. Su mujer [Qianyum Lysis Li, que también aparece en la película] había pasado un mes entero contratando a prostitutas, y ahora todo se venía abajo», continúa el tráiler, explícito en palabras, aunque no en imágenes.
Peligro por «islamofobia»
El temor de Houellebecq no era infundado: además de sus amplios escritos sobre el Islam y, en especial, sobre el avance musulmán en Europa, que le han valido el adjetivo de «islamófobo», en los últimos meses ha protagonizado uno de los mayores culebrones en Francia, donde son muy dados a seguir la vida de los intelectuales patrios. La polémica se enconó a raíz del diálogo de 45 páginas que mantuvieron Houellebecq y el filósofo Michel Onfray en el último número de Front Populaire, publicación y antiliberal dirigida por el segundo.
«Cuando territorios enteros estén bajo control islámico, creo que se producirán actos de resistencia: habrá atentados delante de mezquitas, en cafés frecuentados por musulmanes, en suma, ‘bataclanes’ a la inversa», escribía el autor de Aniquilación, haciendo referencia a los ataques islamistas en la discoteca Bataclan de París en 2015. Más adelante, el novelista afirmaba que el «deseo de los franceses autóctonos» no era tanto que los musulmanes terminasen por asimilarse, sino que «dejasen de violarles y agredirles». Tras un enfrentamiento (e incluso una querella) con el rector de la Gran Mezquita de París, matizó sus palabras, aunque su popularidad no ha aumentado.
De Marruecos a Ámsterdam
El tráiler de Kirac 27, que en principio verá la luz el 11 de marzo, continúa con una oferta del director a Houellebecq ante la cancelación del viaje a Marruecos: «Le dije que había un montón de chicas en Ámsterdam que tendrían sexo con el famoso escritor por curiosidad, y que yo me encargaría de reservar un hotel para él si me daba permiso para filmarlo todo». En este momento, el escritor aparece sentado en la cama del hotel, con una joven risueña a su lado: ambos son conscientes de la presencia de las cámaras y parecen hablar y actuar libremente.
El momento del beso entre Michel Houellebecq y una de las «chicas» (posiblemente, una mujer prostituida) que le facilitaron en Ámsterdam
A continuación, ambos se besan mientras las cámaras lo graban desde diferentes ángulos, incluido un plano cenital imposible de obviar por los protagonistas. Sin embargo, el escritor quiere prohibir el cortometraje alegando «abuso de confianza» y quiere que también se elimine el tráiler de la cinta que ya circula por internet.
Los abogados de Michel Houellebecq y su esposa, Mes Angélique Bérès y Maïa Kantor, han anunciado que se han encargado de tomar «todas las gestiones amistosas y contenciosas, tanto civiles como penales» para obtener la prohibición de la película Kirac 27 por considerarla difamatoria. En su comunicado, los abogados afirman que la pareja descubrió con «consternación y disgusto» que el tráiler contenía «declaraciones graves y falsas que atacaban violentamente su dignidad».
Por lo tanto, instruyó a sus asesores a «poner fin de inmediato a estos ataques por todos los medios» haciendo «retirar este tráiler de plataformas y redes sociales en todo el mundo» y prohibiendo al director y al colectivo «cualquier explotación, comercial o no», en cualquier forma, de la película (...) y demás imágenes que tengan de los cónyuges de Houellebecq.
Según Bérès, contactado por la agencia AFP, «ya se iniciaron procedimientos prejudiciales con el director y las plataformas» para obtener la prohibición de la película, en particular si contiene los comentarios en off del tráiler. En una carta enviada al director, Michel Houellebecq evoca «la explosión de violencia» del tráiler, «que socava irreparablemente su vida privada, su honor y, sobre todo, que es más grave aún, el de su esposa, desolada por las mentiras» difundidas sobre ella.
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