Alguno de los firmantes del manifiesto 'Hay que parar la guerra', el pasado domingo en Madrid.
'El club de la ceja' no firma manifiestos contra la amnistía, pero sí contra el «genocidio» de los palestinos
Almodóvar, Rozalén o Jordi Évole sí se comprometen por Palestina y contra Israel
El nuevo «No a la guerra» es «Hay que parar la guerra». La iniciativa se presentó el pasado domingo en el Ateneo de Madrid (antaño la institución estaba para otras cosas) con más de 4.000 firmas procedentes de 21 países: «Las criminales acciones terroristas de Hamás merecen nuestra condena más enérgica, pero no pueden servir para justificar el genocidio que practica el Estado de Israel contra el pueblo palestino», dice el manifiesto.
Ese «pero» sintomático y característico que introduce la palabra clave, «genocidio», para los firmantes, que piden a Israel que «detenga los bombardeos de inmediato, cumpla el derecho internacional y habilite un corredor humanitario» y también a Hamás, que «pare sus ataques terroristas y la liberación incondicional de los rehenes».
Nombres como los de Almodóvar, Rozalén, Jordi Évole, Buenafuente, Ramoncín o C. Tangana, quienes están a favor de un Acuerdo de paz que posibilite la creación de un Estado palestino, ya se reunieron el pasado 2 de noviembre con el presidente del Gobierno, para trasladarle la intención «de extender dicho documento a nivel internacional».
El propósito, el de trasladar el documento firmado a nivel internacional, que no tienen (porque no han firmado ni van a firmar ningún manifiesto) respecto a la amnistía prevista por ese mismo presidente que amenaza al Estado de Derecho que defienden en otro país, pero que no tienen interés en defenderlo en el suyo.
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