El VAR desquicia al Real Madrid: el partido se pitó desde fuera del Bernabéu y se perdieron casi 10 minutos

Una vuelta de cuartos de final de la Champions League tiene a todos los protagonistas con los nervios a flor de piel. Todo el mundo quiere estar a la altura y en este Real Madrid - Arsenal el que más ha defraudado ha sido el árbitro, el francés François Letexier. Al colegiado le vino grande el choque desde que echó a rodar el balón y en la primera mitad tuvo que ser corregido hasta en dos ocasiones por el VAR.

La primera de ellas ocurrió en el minuto 9. Declan Rice sacó un córner y el árbitro de campo no apreció un agarrón continuado de Raúl Asencio sobre Mikel Merino. Se paró el partido algo más de un minuto por la revisión de la tecnología y tras ver la acción en el monitor el colegiado optó por señalar la pena máxima y amonestar al defensor canario.

A ese tiempo perdido con el VAR hay que sumarle otro minuto hasta que se lanzó. Paró Courtois el lanzamiento de Saka y se perdió otro más en sacar el córner porque los jugadores del Arsenal trataron de parar el juego por si acaso desde la tecnología avisaban al trencilla francés de que debía repetirse porque el belga estaba adelantado. En absoluto era así, pero el tiempo ya estaba perdido. Primera gran interrupción al partido.

A ello hay que sumarle que antes de este penalti Mbappé marcó un gol en fuera de juego. No subió al marcador el tanto, de hecho el francés ni lo celebró, pero la revisión tardó más de lo esperado y además los jugadores gunners aprovecharon para perder algo más de tiempo una vez confirmado que el tanto no valía. Otro par de minutos rascados al crono y sobre todo el primer corte al ritmo que trató de imponer el Real Madrid desde los primeros compases del duelo.

No obstante, la gran polémica llegó en el minuto 22. Un forcejeo en el área del Arsenal entre Mbappé y Rice le pareció en directo penalti François Letexier. Tan claro lo vio que incluso sacó amarilla al centrocampista inglés. De hecho hasta indicó a los jugadores del Arsenal que se fueran rápido para fuera del área y así no perder más tiempo, pero desde el pinganillo le pidieron que echara el freno.

Su compatriota Jéröme Brisard, que es quien le asiste desde el VAR, revisó la jugada. Una acción gris, de esas que se supone que no puede rearbitrar la tecnología, pero que termina haciendo cada semana. Además, el juego estuvo parado más de cinco minutos, con el Bernabéu impacientado, hasta que Letexier se fue al monitor para ver la acción. Se tomó su tiempo, otro minuto más, para finalmente anular el penalti y la amarilla y reanudar el juego con saque de puerta a favor de los londinenses.

Más de 11 minutos parados, sin que rodara el balón y cortando por completo el ritmo del equipo blanco. Únicamente se añadieron siete y además apenas se tuvieron en cuenta las constantes pérdidas de tiempo de los hombres de Arteta. David Raya fue el único que vio la amarilla, por perder el tiempo de manera descarada, y el resto se quedaron en advertencias del árbitro francés pidiendo a los gunners que se diesen prisa.