La ministra de Hacienda, María Jesús Montero
Montero se despide de Calviño destacando su «empatía»: «Las mujeres no nos peleamos. Son los hombres»
La nueva vicepresidenta primera asegura que la gestión de la saliente «marca un hito histórico». Su sucesor, Carlos Cuerpo, hace un guiño a su familia y sus orígenes humildes en Extremadura
Calurosa despedida de María Jesús Montero a Nadia Calviño. La nueva vicepresidenta primera del Gobierno, que asume parte de las competencias de la hasta ahora principal cabeza económica del Ejecutivo, ha destacado que su gestión «marcará un hito histórico».
Montero ha hecho gala de complicidad con Calviño en su despedida antes de su marcha al Banco Europeo de Inversiones, y también con Teresa Ribera, a la que ha querido subir al estrado en su toma de posesión como vicepresidenta primera. «La política es lo mejor que le puede pasar a uno. Es realmente la única herramienta que tenemos la gente normal que no somos poderosos para cambiar el futuro y la vida de la gente», ha asegurado.
Montero, que gana peso como principal figura económica del Ejecutivo, ha deseado al sucesor de ésta en Economía, Comercio y Empresa, Carlos Cuerpo, alcanzar «la misma complicidad» con ella de la que tuvo con la vicepresidenta saliente. «Yo la voy a echar muchísimo de menos y creo que es su paso por el Ministerio de Economía ha sido histórico», ha señalado Montero.
La hasta ahora vicepresidenta cuarta y ministra de Hacienda ha querido hacer hincapié precisamente en esa «complicidad» entre vicepresidentas durante la pasada legislatura. «Los hombres se pelean entre ellos, las mujeres normalmente procuramos [auxiliamos], procuramos ayudarnos y nos entendemos que en política es muy importante entenderse, ser capaz de captar el sentimiento que tiene otra persona para poder también ayudarlo a superarlo, ayudarlo a combatirlo», ha asegurado.
Montero, Calviño y Carlos Cuerpo
Guiño de Cuerpo
Por su parte, Carlos Cuerpo, el ya sustituto de Calviño en Economía, ha querido hacer en su discurso un guiño a los orígenes humildes de su familia, con una mención especial a su abuelo, «que cargaba arena en su burro y fue pinche de cocina en la mina de wolframio», y a su hija, de 9 años, la misma edad que él tenía cuando su familia emigró a Suiza.
«Los de mi generación ya tenemos la responsabilidad de gestionar el mundo para nuestros hijos», ha asegurado Cuerpo. De currículum eminentemente técnico, el nuevo ministro ha prometido que la continuidad respecto a la etapa de Calviño será la tónica durante su gestión. «Tenemos que actuar con rigor técnico y guante de seda, como le gusta decir a Nadia», ha afirmado. «Tengo plena convicción de que lo vamos a hacer bien porque no nos podemos permitir fallar».
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