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17 de mayo de 2024

Sucursal de Kutxabank.

Sucursal de Kutxabank.Jesús Hellín - Europa Press

Bildu apunta a Kutxabank tras las elecciones vascas: «No tiene una visión de país suficiente»

Los herederos de Batasuna plantean un fondo soberano de más de 1.000 millones «para impulsar la política industrial» del País Vasco

EH Bildu apunta a Kutxabank. El candidato a lendakari de la formación, Pello Otxandiano, ha asegurado este martes que el banco, con sede en Bilbao y fruto de la fusión de Bilbao Bizkaia Kutxa, Kutxa y Caja Vital, no tiene una visión de país «suficiente».
Para Otxandiano, Kutxabank «tiene posibilidades de jugar un rol mucho más importante». A su juicio, hasta ahora no se han utilizado los instrumentos que existen para dotar al País Vasco de «músculo financiero para hacer una política industrial activa».
Así se ha pronunciado este martes el candidato durante la presentación de su propuesta para crear un fondo soberano para la inversión estratégica, que podría arrancar inicialmente con una cifra aproximada de más de 1.000 millones de euros, para dotar a la comunidad autónoma del músculo financiero que impulse una política industrial «activa», en la que sea clave el liderazgo público frente a la actual estrategia «autocomplaciente» del Gobierno vasco, que puede llevar al «declive» a la región, según recoge Europa Press.

En «fase de declive»

Otxandiano ha asegurado que la situación de la economía vasca «no es catastrófica ni mucho menos» pero, «si no hay una reacción a escala en el plazo de una generación, se corre el riesgo de «entrar en una fase de declive».
No es la primera vez que se pronuncia en estos términos sobre el banco vasco. En su Mirada para el futuro del país, publicada en febrero con los principales puntos del programa de la formación, ya afirmaba que «se deben explorar todas las vías que permitan a las instituciones recuperar el control del que podría ser un instrumento financiero de gran potencial, para el impulso del desarrollo económico y social de nuestro pueblo».
El banco vasco, que también es dueño del andaluz Cajasur, anunció el pasado noviembre la compra de una nueva sede en Madrid. Lo hizo, según confirmó entonces, «ante las buenas perspectivas de crecimiento en la capital».
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