Rodrigo Alonso, durante su entrevista para El Debate
Entrevista
Rodrigo Alonso (Vox): «Estamos defendiendo el 25 % en Cataluña, cuando deberíamos estar reclamando el 100 %»
El secretario general del sindicato Solidaridad señala que preparan varias movilizaciones este otoño para decir al Gobierno «basta» y pedirle que convoque elecciones
rodrigo Alonso es secretario general del sindicato Solidaridad, que ha llamado a salir a las calles en varias ocasiones contra las medidas del Gobierno, y también es portavoz adjunto de Vox en el Parlamento de Andalucía. Atiende a El Debate días después de que su sindicato haya logrado entrar con fuerza en el Comité de empresa de Glovo Market, y a pocos días de la manifestación en Barcelona para defender el bilingüismo en Cataluña.
–Este domingo 18 de septiembre Solidaridad acudirá junto a Santiago Abascal e Ignacio Garriga a la manifestación en Barcelona convocada por Hablamos español y otras organizaciones en defensa del bilingüismo en Cataluña. ¿Qué diría a los catalanes y al resto de españoles para que acudan?
–Estamos ante un hecho gravísimo. En primer lugar, de desobediencia institucional. Y en segundo lugar, hemos llegado a la situación de defender que en Cataluña al menos el 25 % se dé en español en las aulas, cuando deberíamos estar reclamando el 100 %. Estamos reclamando una migaja, con el grave problema que a futuro van a tener los jóvenes de Cataluña. Se puede dar la circunstancia de que un joven catalán de Barcelona, que se forme en un oficio o en una carrera universitaria, decida irse a cualquier otra provincia de España y se sienta un extranjero en su propio país porque el aprendizaje que ha recibido ha sido en catalán y no sabe hacerlo en español.
Por ejemplo, el otro día en Valencia, una profesora, después de 35 años de interinidad, pierde su puesto de trabajo porque no tiene el título de valenciano. Al acceder a un puesto de trabajo en Barcelona, si sabes catalán tienes más puntos que si no lo sabes. Se están pervirtiendo las posibilidades de acceder a un puesto de trabajo en igualdad de condiciones dentro de tu propio país.
–¿Cree que es reversible la situación que se está viviendo en Cataluña?
–La situación es difícil, pero por supuesto que es reversible. Si considerásemos que la situación es irreversible, estaríamos asimilando la derrota, y estaríamos dándole la razón a aquellos que tradicionalmente quieren o han querido atentar contra la unidad de España y que han fomentado el separatismo en Cataluña o en el País Vasco o en Galicia. Tiene solución, claro que la tiene, pero para ello ha de haber una voluntad política. Los nacionalismos en España, de cara a la formación de gobiernos, no pueden convertirse en un mercadeo para llegar a formar el Ejecutivo o no, que es lo que se ha producido en los últimos años.
–Este lunes Jorge Buxadé aseguraba que Vox está preocupado porque se está presentando a ERC como «víctima» a raíz de la división en el independentismo por la Diada. ¿Cómo ven el escenario que se refleja de cara a este nuevo curso político, que además es año electoral?
–Es que la víctima no es ERC, la víctima es España. Esquerra Republicana, igual que cualquier partido separatista, lo que fomenta es la destrucción de la unidad de España, y Cataluña no le pertenece a los catalanes. Cataluña le pertenece a España.
Se están pervirtiendo las posibilidades de acceder a un puesto de trabajo en igualdad de condiciones dentro de tu propio paísSecretario general del sindicato Solidaridad
–La semana pasada Solidaridad logró casi un 50 % de apoyo en las elecciones sindicales de la empresa Glovo Market. ¿Interpreta esto como un rechazo por parte de gran parte de sus trabajadores a la Ley rider de Yolanda Díaz?
–En primer lugar, quiero mostrar la satisfacción por el trabajo realizado, ya que los riders han visto en Solidaridad una nueva forma de hacer sindicalismo. Desde que fue aprobada esta ley, hemos estado en constantes conversaciones con ellos y han visto en nosotros un sindicato que escucha lo que verdaderamente necesitan para ponerlo encima de la mesa.
La Ley rider se negoció entre la ministra de Trabajo y CCOO y UGT, los sindicatos de clase tradicionales. Según los propios riders, todas aquellas reivindicaciones que pusieron encima de la mesa, no se tomaron en consideración, y UGT y CCOO, de forma unilateral e ideológica, negociaron con la ministra a espaldas de los trabajadores. En su día, ya avisamos de las consecuencias que iba a haber, y llevó a lo que se ha visto con el tiempo: gente en el paro y una mayor precariedad. La ley no asegura en ningún momento unas mejores condiciones de trabajo para los riders.
–¿Está de acuerdo con la subida del Salario Mínimo Interprofesional (SMI) que plantea el Ministerio de Trabajo?
–La subida del Salario Mínimo Interprofesional debe ir siempre aparejada de una disminución de las cotizaciones sociales y de los impuestos a las empresas. No solamente lo decimos desde el sindicato Solidaridad, nos avala el informe del Banco de España, que recogió que la subida del SMI de los últimos años ha provocado paro. No ha supuesto ni una mejora en las condiciones de trabajo ni salariales.
Nosotros hablamos de un salario básico digno, es decir, aquel salario que te permita asumir unas condiciones dignas de vida. Pero si eso no va aparejado de una bajada paralela en las cotizaciones sociales y en los impuestos, esa subida del SMI se convierte en paro y en una paralización del mercado de trabajo. El problema de base no se está atajando, que es el alto nivel impositivo que hay en España. Mientras no se pongan todos los mecanismos necesarios para que esas subidas en términos netos lleguen al bolsillo del trabajador y esto no suponga un entorpecimiento o un agravamiento de los costes en el tejido empresarial, jamás hablaremos de que las subidas del SMI en España sean positivas para el trabajador.
–¿Cómo describía el marco laboral al que se enfrentan ahora mismo los trabajadores en España?
–Estamos en una situación de inflación de un 10,5 %, la cesta de la compra, los productos básicos se van encareciendo cada día más. Con esta incertidumbre y este agravio que tienen en la renta familiar todos los trabajadores, el panorama no es nada halagüeño. ¿La manera de solucionar esto? Volvemos a la misma solución: bajar impuestos. Se pagan muchísimos impuestos. A cifras del segundo trimestre, el incremento en recaudación es superior a casi el 18 %. ¿Quién gana con la inflación? El Estado. ¿Por qué? Porque no baja los impuestos. ¿Quién pierde? Los trabajadores y el conjunto de las familias.
Tenemos que salir a la calle a decirle a este Gobierno «basta», incluso que convoque eleccionesSecretario general del sindicato Solidaridad
–El pasado marzo, el Gobierno aprobó una partida de 17 millones para las subvenciones de los sindicatos. ¿Cree que han dejado de defender a los trabajadores? Y si es así, ¿cree que los ciudadanos lo perciben?
–Los ciudadanos lo perciben porque España es uno de los países que menos trabajadores sindicados tiene. Los trabajadores tienen una percepción muy negativa del sindicalismo en España. No les falta razón, porque aquellos que llevan negociando desde que se instaura la democracia en España los convenios colectivos son los sindicatos de clase, fundamentalmente UGT y CCOO, que son los mismos que reciben cantidades ingentes de subvenciones millonarias públicas y que, evidentemente, al sobrevivir con esas cantidades millonarias, no van a ir en contra de ningún Gobierno, al menos de forma férrea, y mucho menos, como ocurre en la actualidad, si esos gobiernos son de corte ideológico igual que el de estos sindicatos.
UGT y CCOO no han salido contra el incremento de la factura de la luz, ni contra el incremento del combustible ni contra el incremento de la cesta de la compra. Estos sindicatos son lacayos de este Gobierno. Nosotros defendemos que los sindicatos deben financiarse con las cuotas de sus afiliados, como hace el sindicato Solidaridad. Todo lo demás te lleva a estar sometido a la voluntad del poder ejecutivo, sean cuales sean las siglas.
–Solidaridad ha convocado varias manifestaciones en el último curso. ¿Planean convocar movilizaciones en los próximos meses?
–Los próximos meses desde el sindicato Solidaridad vamos a emprender movilizaciones en las calles. Se augura un otoño 'calentito', pero con diferentes motivos por los que UGT y CCOO quieren salir. Nosotros vamos a salir contra el Gobierno de España para que de una vez por todas deje de saquear a los trabajadores de España, deje de saquear a las familias y que con ese expolio fiscal deje de empobrecernos, porque al fin y al cabo lo que se está produciendo es un empobrecimiento generalizado de la población. La inflación debemos de poner siempre de manifiesto que es el impuesto a los pobres. Tenemos que salir a la calle a decirle a este Gobierno «basta», incluso que convoque elecciones y que sea el pueblo como soberano el que decida quién quiere que le gobierne.
–Pasemos ahora a Andalucía. Uno de los temas con el que su partido choca con el Gobierno de Juanma Moreno es la cuestión climática. ¿Qué van a proponer al Ejecutivo regional desde el punto de vista energético?
–Nos preocupan enormemente las decisiones de Juan Manuel Moreno Bonilla, sobre todo tras el anuncio que hizo el consejero de Presidencia, Antonio Sanz, en la constitución de un comisionado de seguimiento de la Agenda 2030. Seguir los postulados de la Agenda 2030 llevando el cambio climático por bandera y llevando como eje central de la política esa transición energética de nuestros modelos de producción que llaman verde y sostenible nos ha llevado justo a la situación que tenemos hoy en día. Desde Vox, ya en octubre de 2018, se hablaba del problema de la pérdida de soberanía energética, y esta ha sido una constante a lo largo del tiempo. Ni nos podemos sorprender ni, por supuesto de forma demagógica, como se está haciendo, culpar de esta situación solo y exclusivamente a la invasión de Ucrania por parte de Rusia.
En julio de 2020, Vox ya demandó la rebaja del IVA de la luz al 4 %. En octubre de 2020 se reclamaba ya la soberanía energética y Vox denunciaba que se estuviesen cerrando las centrales nucleares. Nos tacharon de autárquicos, de aislacionistas, que añorábamos modelos de gobierno anteriores a la democracia. Pero la realidad es que hemos acertado. Consecuencia de eso, hoy tenemos una alta dependencia energética del exterior, una inflación al 10,5 %, una alta dependencia del exterior en materia industrial. Y esto redunda de forma directa contra el mercado de trabajo. Se traduce en la pérdida de puestos de trabajo, y siempre lo hacen en nombre del cambio climático.
Se puede luchar para la conservación del medio ambiente, pero lo que no se puede hacer es destruir nuestros modelos de producción en nombre del cambio climáticoSecretario general del sindicato Solidaridad
Aquí se dan palmadas en el pecho como consecuencia del cierre de la térmica, por ejemplo, en Carboneras, en Almería, pero sin embargo, la energía térmica se la compramos a Marruecos. Se ha aplaudido en España el cierre de la central nuclear, por ejemplo la de Garoña; sin embargo, compramos la energía nuclear de Francia. Ahora con el gas, la dependencia, ya no de Argelia, sino de Rusia, y por cierto, somos el país que más gas compramos a Rusia, lo que nos lleva a comprar gas de Estados Unidos.
En España, que emite el 0,8 % de todas las emisiones globales de CO2 del planeta, ¿vamos a destruir nuestras centrales de producción energética, nuestras industrias, para que luego China, Estados Unidos o la India no hagan nada y llenen nuestro país de sus productos? Creemos que es un auténtico despropósito. Se puede luchar para la conservación del medio ambiente, pero lo que no se puede hacer es destruir nuestros modelos de producción en nombre del cambio climático, para que luego nuestros trabajadores y nuestras familias lo único que recojan sea paro y miseria. ¿Qué le pedimos a Moreno Bonilla? Que se aleje de toda esa política, que derogue la Ley de cambio climático que se aprobó en Andalucía, que se aparte de toda esa agenda globalista que supone la Agenda 2030 y que lleva a la ruina al sector primario, agricultura, ganadería, pesca, al sector secundario, la industria, y al sector terciario también.
–Además de la cuestión energética, ¿qué le van a exigir a Juanma Moreno en esta nueva legislatura?
–Que todo el dinero que pueda, tanto de fondos europeos como de auto financiado, lo destine a crear puestos de trabajo, solo y exclusivamente. Porque la mejor política social que hay es el empleo. Sin embargo, ¿qué hace el Gobierno de Moreno Bonilla? Ha superado en altos cargos a los gobiernos anteriores socialistas e incrementa el número de consejerías.
–¿Les ha hecho daño la salida de Macarena Olona?
–No, que va. Nos ha hecho daño la salida de Macarena Olona, para los que la conocemos y hemos tenido una relación más cercana, desde el punto de vista personal. Qué duda cabe. Una persona de esa valía y con ese corazón... Desde el punto de vista profesional o del funcionamiento del grupo, prescindir por motivos de salud como ella muy bien dejó claro, evidentemente…Macarena tiene una valía extraordinaria. El nivel que hay ahora mismo en el grupo es muy bueno. Tenemos la experiencia de rodaje de los cuatro años anteriores y ahora mismo el grupo está funcionando de forma extraordinaria, con muchísimas ganas, con mucho entusiasmo y con mucha esperanza de poder hacer las cosas bien y trasladar nuestra experiencia al Parlamento.
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