Policía Nacional en una imagen de archivo
Violencia de género
Asesina a su novia y a la hija de ella en Valladolid, confiesa y luego se lesiona
Agentes de la Policía nacional ha detenido al presunto agresor, que era pareja de la mujer, que tenía heridas de arma blanca causadas por él mismo
Eran poco más de las tres de la mañana cuando ha sonado el teléfono en la sede del 112. Al otro lado del teléfono un hombre azorado. «Me acaba de llamar mi cuñado muy nervioso para decirme que ha matado a su novia», explicó alterado. El operador le pidió sus datos, los del supuesto agresor y la dirección donde se había producido el apuñalamiento: en el Paseo José Zorrilla de la capital pucelana, una de las arterias más importantes de Valladolid, no muy lejos de la plaza de toros. Lo siguiente fue enviar a ese lugar una ambulancia medicalizada y también a varias patrullas de Policía Nacional.
Los agentes subieron al quinto piso: desde el rellano llamaron a la puerta insistentemente y se identificaron a gritos: «¡Policía! ¡Abra la puerta!», pero, aunque escuchaban ruido dentro, nadie les abría. Hubo que llamar a los bomberos para forzar la puerta. Al acceder a la vivienda, se encontraron un panorama desolador: una niña de 8 años muerta, vestida con un pijama ensangrentado, apuñalada varias veces en el comedor. También su madre, de 46, tirada en la cocina había sido asesinada con el mismo cuchillo que el agresor había utilizado con la pequeña.
En el interior de la casa localizaron también a un varón con rastros de sangre en sus ropas: «He sido yo», apenas ha balbuceado. El hombre, que vivía en el domicilio con ambas, tenía varias heridas realizadas también con el filo de un cuchillo. Todo apunta a que se trata de lesiones que se había infligido él mismo. Los agentes lo han detenido y lo han llevado al Hospital Clínico Universitario de Valladolid para que allí le curasen las heridas superficiales que presentaba.
El asesino confeso tenía antecedentes por violencia de género. Concretamente de 2017, cuando lo denunció su pareja de entonces. En este caso, la fallecida, su pareja, nunca lo había denunciado. Con esta muerte son al menos ya siete mujeres asesinadas por la violencia machista en nuestro país. El mes anterior fue un diciembre negro: trece víctimas.
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