El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page
Page ve «diabólico» dejar la gobernabilidad en manos de «un prófugo»
Aboga por una mesa del Congreso «reflejo de la mayoría y de la pluralidad» porque «es la tercera autoridad del Estado»
El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, calificó ayer de «diabólicos» los resultados de las elecciones generales del pasado 23 de julio ya que han hecho que han hecho que el Gobierno de España «dependa de un prófugo de la Justicia» ya que «puede decidir en el Estado sin renunciar a acabar con el Estado», consideró en una entrevista en Castilla-La Mancha Media.
Por eso, considera que la legislatura «comienza al filo de la navaja» por lo que, en caso de que finalmente haya proceso de investidura será «la más vertiginosa y montaña rusa» de cuantas ha vivido.
Ante «muchas incógnitas», asegura no saber cuál serán los planteamientos sobre los que se podrá llegar a algún acuerdo con los independentistas de Junts toda vez que la derecha «no suma».
Investidura
Con todo, cree que «se impondrá la lógica de que no haya unas segundas elecciones», pero en España «ha hablado la gente» y aún así no se atreve a «etiquetar» el resultado de las generales. «Da la impresión de que no ha ganado nadie».
Eso sí, responsabilizó al Partido Popular del blanqueamiento «de otros extremismos» ya que «se ha casado con Vox más de lo que quería Feijóo», lo que ha dado «coartada» para poner en buen lugar a formaciones radicales.
La Mesa del Congreso
Respecto a la Mesa del Congreso de los Diputados que se está negociando en estos momentos ya que tiene que ser proclamada el próximo jueves, García Page señaló que espera que sea «un reflejo de la mayoría y de la pluralidad» del Parlamento, abriendo la puerta a la presencia de independentistas como reclaman formaciones como Sumar y los propios nacionalistas.
No obstante, considera que la presidencia del Congreso debe recaer en alguien socialista porque «que el presidente sea la tercera autoridad del Estado implica defender el Estado, no cuestionarlo». Por eso, «entiendo que quien quiera cuestionarlo no está en condiciones de ser la tercera autoridad», aclaró Page.
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