Pedro Sánchez y José Luis Rodríguez Zapatero
Una gran diferencia
Zapatero sale en ayuda de Sánchez y lo empeora: la amnistía del 36 sí iba en el programa del PSOE
Precisamente el argumento que utilizó entonces el Frente Popular fue que había sido respaldada por la mayoría electoral, todo lo contrario que ahora. Feijóo insiste en pedir elecciones
José Luis Rodríguez Zapatero ha querido salir en ayuda de Pedro Sánchez, como hiciera durante la campaña electoral de las generales, y lo ha empeorado. Porque el expresidente del Gobierno ha comparado la amnistía que ahora negocia su partido con la que en febrero de 1936 decretó en Gobierno de Manuel Azaña, sin mencionar que aquella sí iba en el programa del Frente Popular. La coalición electoral de la que formaron parte los socialistas.
De hecho, fue precisamente ése el argumento utilizado por la izquierda para aprobar el decreto ley de amnistía el 21 de febrero de ese año, que entre otros benefició al expresidente catalán Lluís Companys, encarcelado por proclamar el Estado Catalán dentro de la «República Federal Española» en octubre de 1934.
«Siendo inequívoca la significación del resultado de las elecciones a Diputados a Cortes en cuanto a la concesión de una amnistía por delitos políticos y sociales, en favor de la cual se ha pronunciado la mayoría del Cuerpo electoral, y tratándose de una medida de pacificación conveniente al bien público y a la tranquilidad de la vida nacional, en que están interesados por igual todos los sectores políticos», rezaba el texto.
El PP y Vox llevan semanas exigiendo a Sánchez que convoque elecciones para que los españoles se pronuncien sobre la amnistía, puesto que no figuraba en el programa del PSOE. Ni siquiera en el de Sumar, su socio. Es más. Hasta después de las elecciones, el propio presidente del Gobierno y varios de sus ministros negaron la posibilidad de amnistiar a los encausados del procés. Este mismo lunes, Alberto Núñez Feijóo lo calificó de «gran fraude».
Por el contrario, el programa con el que el Frente Popular ganó las elecciones del 16 de febrero de 1936 tenía la amnistía como asunto nuclear. En él, los partidos integrantes se comprometían a: «Conceder por ley una amplia amnistía de los delitos politicosociales cometidos posteriormente a noviembre de 1933, aunque no hubieran sido considerados como tales por los Tribunales. Alcanzará también a aquellos de igual carácter no comprendidos en la ley de 24 de abril de 1934. Se revisarán con arreglo a la ley las sentencias pronunciadas en aplicación indebida de la de Vagos, por motivos de carácter político; hasta tanto que se habiliten las instituciones que en dicha ley se prescriben, se restringirá la aplicación de la misma y se impedirá que en lo sucesivo se utilice para perseguir ideas o actuaciones políticas».
Aquel programa lo firmaron Izquierda Republicana, Unión Republicana, el Partido Socialista Obrero, la Unión General de Trabajadores, la Federación Nacional de Juventudes Socialistas, el Partido Comunista, el Partido Sindicalista y el Partido Obrero de Unificación Marxista.
Companys regresó a Barcelona el 2 de marzo de 1936, aclamado por una multitud enfervorecida. Azaña acabaría escribiendo sobre él: «Ha vivido no solamente en desobediencia, sino en franca rebelión e insubordinación».
En su entrevista en Onda Cero, Zapatero sostuvo que cuando Sánchez negaba la amnistía se refería al «tipo de amnistía» que llevó el independentismo al Congreso a través de una proposición de ley que la Mesa inadmitió a trámite en marzo de 2021. «Parece evidente», añadió, aunque aclaró que no es que se lo hubiera dicho Sánchez, sino que es una conclusión suya. En cualquier caso, «si hay que cambiar de opinión se cambia de opinión», resumió.
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