El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, durante el pleno del Congreso de los Diputados
Las fragilidad del Gobierno
Sánchez intenta aclarar sus cesiones a Puigdemont y dice a Junts que la expulsión de inmigrantes depende del Gobierno
El presidente del Ejecutivo ha señalado que las concesiones se limitan a «lo que está reconocido en el Estatuto de Autonomía de Cataluña en materia de política migratoria»
Pedro Sánchez ha tenido que salir a aclarar qué es lo que pactó con Junts durante el Pleno del Congreso del pasado miércoles para conseguir el aval de los de Puigdemont y aprobar sus tres primeros 'decretazos' de la legislatura. Así, el presidente del Gobierno –tras ocho preguntas sobre este mismo tema en una entrevista en el diario El País– ha afirmado que «la expulsión de los migrantes compete a la Administración General del Estado»; declaraciones que contradicen de manera frontal lo manifestado por Junts.
Tan solo un día después del acuerdo del Ejecutivo con los secesionistas catalanes, el dirigente de Junts, Jordi Turull, aseveró que su formación aspira a poder decidir sobre la expulsión de inmigrantes. «Tenemos que mirar en qué condiciones se les puede echar», indicó acerca de los extranjeros multirreincidentes.
Sin embargo, cuando a Sánchez le han cuestionado de manera directa «qué es lo que ceden» el también líder del PSOE se ha limitado a decir que «pues lo que está reconocido en el Estatuto de Autonomía de Cataluña en materia de política migratoria». «Yo no estoy diciendo eso (que Cataluña expulse a inmigrantes), al contrario. El Pacto de Migración y Asilo de la Unión Europea es bastante claro. Vamos hacia una política comunitaria», ha agregado.
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez
Además, la cabeza del Ejecutivo también se ha escudado en la Constitución y en el Estatuto catalán para justificar la conveniencia de sus cesiones y darle un barniz de legalidad. No obstante, Turull lo explicó en una entrevista radiofónica: «El PSOE fue cediendo, fue cediendo, fue cediendo; y así, hasta el último minuto, hasta el último segundo». Con el reloj apremiando, las cesiones llegaron a tal y punto que ni uno ni otro se ponen de acuerdo sobre lo concedido, lo que pone de manifiesto la fragilidad de este Gobierno por los apoyos de sus socios 'Frankenstein'.
«Vamos a legislar con paciencia y determinación», ha agregado Sánchez en referencia la necesidad de llegar a acuerdos parlamentarios previos antes de que se produzcan las votaciones. El presidente del Gobierno también ha sostenido que «no he engañado a nadie» y ha reconocido que «voy a buscar votos hasta debajo de las piedras», por lo que habrá que ver qué más cede a los separatistas a lo largo de la legislatura.
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