El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez
Día de la Constitución
Pedro Sánchez pide reformar la Constitución para incluir el aborto
También aboga por incluir el matrimonio entre personas del mismo sexo
Sánchez evita las preguntas en los actos del Congreso en plena crisis de corrupción del PSOE
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha pedido este viernes, durante los actos de celebración en el Congreso de los Diputados de la Constitución, reformar el texto para «blindar» el aborto y el matrimonio homosexual ante el «avance reaccionario».
En esa misma línea, aunque sin mencionar expresamente para qué, se pronunciaba el pasado miércoles el delegado del Gobierno, Francisco Martín, en su acto de aniversario de la Carta Magna en el que abogó en diversas ocasiones por su reforma porque esta debe ser «permeable a la evolución de los valores sociales». Unas palabras que él mismo recordaba hoy en sus redes sociales.
En su discurso de este viernes, a cuyo término ha evitado responder a las preguntas de los periodistas, Sánchez ha recordado que en el Congreso del PSOE celebrado el pasado fin de semana en Sevilla, el partido planteó en sus resoluciones esas reformas de la Constitución para incluir el matrimonio entre personas del mismo sexo, que es legal en España desde 2005, bajo el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero, y el aborto, ampliado en nuestro país en 2022 con una reforma impulsada por la entonces ministra de Igualdad, Irene Montero.
La regulación del aborto en España ha evolucionado desde la despenalización parcial en 1985, cuando se permitió en casos de riesgo para la salud física o psíquica de la mujer, hasta la ley de 2010, que amplió los plazos y condiciones para la muerte del feto hasta la semana 14.
La propuesta de Sánchez plantea una serie de interrogantes sobre la verdadera naturaleza de la «libertad» que se busca proteger. Incluir el aborto como derecho en la Constitución podría interpretarse como un reconocimiento de que la vida del no nacido es menos valiosa que la autonomía de la mujer. A medida que el acceso al aborto se normaliza, se corre el riesgo de desincentivar la búsqueda de alternativas que podrían ofrecer apoyo a las mujeres en situaciones difíciles, como la adopción o programas de ayuda a la maternidad.
La propuesta del PSOE de blindar el aborto como derecho en la Constitución también plantea preocupaciones sobre su impacto en la percepción pública sobre la vida y la dignidad humana. La urgencia por asegurar esta práctica mortal en la Carta Magna elimina de su ideario cualquier consideración a los derechos de los no nacidos, que son una reivindicación para muchos sectores de la sociedad.
