El PNV se agrieta ante el inesperado éxito de Aitor Esteban entre las bases frente a Ortuzar

El actual presidente del Partido Nacionalista Vasco (PNV), Andoni Ortuzar, esperó hasta el último momento para anunciar que se presentaba a la reelección en el cargo. Esta tardanza provocó que de batzoki en batzoki (sede local del PNV) comenzara a surgir el nombre del portavoz en el Congreso de los Diputados, Aitor Esteban, en las quinielas para presidir el partido.

Quizá por ese motivo, Esteban se ha impuesto en medio centenar de batzokis de todo el País Vasco, lo que le convierte en firme candidato para resultar elegido en la 'asamblea nacional' del partido del próximo mes de marzo, quitándole así el poder a su gran amigo, Andoni Ortuzar.

Se abre así una grieta en el seno del PNV entre dos amigos de toda la vida. Tal es lo que une a Andoni Ortuzar y a Aitor Esteban que tan solo les separan tres semanas en el día de nacimiento. Pero el fuerte apoyo que están obteniendo ambos políticos hace muy complicado que ninguno de los dos opte por echarse a un lado.

La elección del presidente del Euskadi Buru Batzar, la dirección política del PNV es de lo más peculiar. En una primera fase, los afiliados votan en los batzokis a una persona, cualquiera, del partido. Esta primera vuelta concluyó este domingo.

Los que hayan ganado en al menos tres batzokis pasarán a la segunda vuelta. Pero antes, esta vez sí, tendrán que aceptar personalmente su candidatura. Ortuzar ya expresó el pasado 18 de enero su intención de mantenerse como candidato para continuar un cuarto mandato al frente del EBB. Aitor Esteban, por su parte, se dejó querer hace tan solo una semana, en plena votación de la primera ronda que «el PNV tiene sus normas y éste es el momento de los afiliados», dijo sin mostrar intención de retirarse.

Ortuzar lleva tres mandatos al frente del PNV. En este tiempo ha visto cómo Bildu le está comiendo el terreno, cómo los de Otegi ya se imponen en las municipales... y en las autonómicas del pasado 21 de abril les empató a escaños. De hecho, en el último año, sus candidatos 'oficiales' han renovado la dirección del PNV en las tres provincias vascas explicando que era el momento de dar un aire fresco al partido... hasta que llegó su turno.

Esteban, sin embargo, está teniendo mucho más protagonismo mediático como portavoz en el Congreso de los Diputados. Además, es la cabeza visible del equipo negociador con el Gobierno de Pedro Sánchez, donde está consiguiendo importantes logros como el palacete de París. Eso sí, si resultara elegido presidente del PNV, tendría que dimitir de la portavocía en el Congreso de los Diputados.

Será esta semana, cuando se conozcan los resultados oficiales de la primera vuelta, cuando se desvelará si alguno de los candidatos da un paso al lado o se confirma la ruptura del PNV.