El presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, este jueves durante el pleno del Parlamento andaluz

El presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, durante un pleno del Parlamento andaluzRocío Ruz | Europa Press

Andalucía

La izquierda vuelve a la carga contra Juanma Moreno a cuenta de los conciertos con la sanidad privada

  • El SAS saca a licitación dos acuerdos marco por valor conjunto de 734 millones para derivar consultas y operaciones a clínicas privadas

  • Los partidos de izquierdas hablan de «privatización encubierta» de la sanidad

El Gobierno andaluz ha impulsado un plan de choque para reducir las listas de espera sanitarias mediante conciertos con la sanidad privada. El Servicio Andaluz de Salud (SAS) tiene previsto destinar un total de 734 millones para consultas externas y operaciones en clínicas privadas tanto de Andalucía como de las comunidades limítrofes; una medida que los sindicatos y los partidos de izquierdas han recriminado a Juanma Moreno.
Para empezar, el SAS acaba de sacar a licitación, por un importe de 87.439.980 euros, IVA incluido, el acuerdo marco «por el que se fijan las condiciones para la contratación del servicio de asistencia sanitaria complementaria para pruebas diagnósticas en centros sanitarios y servicios privados de Andalucía y provincias limítrofes pertenecientes a otras comunidades autónomas».
La licitación se ha dividido en 34 lotes, y el valor estimado del contrato asciende a un montante total de 201.111.954 euros, toda vez que la duración del acuerdo marco es de dos años prorrogables por otros dos, según la información publicada por la Junta de Andalucía en su plataforma de contratación.
Este acuerdo marco se enmarca dentro de los «conciertos sanitarios» suscritos por la Administración autonómica con «entidades privadas titulares de centros y/o servicios sanitarios», que «responden a la necesidad de complementar los dispositivos asistenciales propios, dando respuesta a la protección del derecho a la salud» reconocido en la Constitución.
El SAS, adscrito a la Consejería de Salud y Consumo, defiende para justificar esta licitación que «se hace necesaria la contratación de conciertos, con empresas autorizadas al respecto, por carecer de medios propios suficientes para realizar las distintas actividades y pruebas diagnósticas».
«Dada la experiencia acumulada en estos años es necesario acudir nuevamente a la contratación del servicio para poder garantizar y dar cumplimiento a los plazos de garantía en pruebas diagnósticas a los usuarios del Servicio Andaluz de Salud…», añade la Junta.
Además, hay un segundo acuerdo marco en licitación por un importe de 231.886.643,50 euros, IVA incluido, «por el que se fijan las condiciones para la contratación del servicio de asistencia sanitaria complementaria para procedimientos quirúrgicos a usuarios del Servicio Andaluz de Salud (SAS) en centros sanitarios y servicios privados de Andalucía y provincias limítrofes pertenecientes a otras comunidades autónomas».
Este acuerdo marco, que tiene un valor estimado de 533.339.280,05 euros, se estructura en 39 lotes para acometer reparaciones de hernia inguinal, mamoplastias, operaciones de transformaciones de sexo (colovaginosplastias y faloplastias) o artroscopias, entre otros procedimientos, y se extiende a dos años con posibilidad de prorrogarse por otros dos, también con el objetivo de reducir las listas de espera.

La izquierda, a una contra Moreno

La izquierda ha aprovechado este plan de choque contra las listas de espera para volver a la carga contra el presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, aludiendo a una supuesta privatización de la sanidad andaluza. «La técnica que está usando la consejera de Salud –Catalina García– es la perfecta para privatizar nuestro sistema sanitario público», afirman desde el sindicato UGT.
Del mismo modo, la vicesecretaria general del PSOE andaluz, Ángeles Férriz, acusó este martes a Moreno de «debilitar» la sanidad pública y se preguntó por qué esos 734 millones de euros que se destinan a los conciertos privados no se invierten en la sanidad pública.
Por su parte, la portavoz socialista de Salud en el Parlamento de Andalucía, María Ángeles Prieto, afirmó que este nuevo concierto con la sanidad privada «evidencia el fracaso de Moreno Bonilla, ya que –aseguró– sufrimos las mayores listas de espera de la historia». Según Prieto, «esta situación es la que le sirve de excusa al Gobierno andaluz para destinar dinero a clínicas privadas y quitárselo a la sanidad pública».
Además, el coordinador general de Izquierda Unida Andalucía, Toni Valero, ha hablado de «privatización encubierta» y de que «el Partido Popular no ve la salud como un derecho, la ve como un negocio, y un negocio muy lucrativo». La secretaria general de Podemos Andalucía, Martina Velarde, también ha dicho que el PP «es la misma derecha de toda la vida, la que permite hacer negocio a unos pocos a costa del bienestar de los andaluces».
Según informó este mismo martes la consejera de Salud, el peso de los conciertos en la sanidad andaluza fue de un 4,22 % del gasto sanitario en 2017; un 4,19 % en 2018 (aún con el PSOE en la Junta); en 2019, un 3,98 %; en el 2020, un 4,15 %; un 4,08 % en 2021; en 2022, un 5,02 %, y un 4,03 % en 2023.
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