El alcalde de Cartaya y su cruzada contra la inmigración ilegal tras un apuñalamiento: «Mandadlos a su país»

Al alcalde de Cartaya, Manuel Barroso (PP), no le han dolido prendas a la hora de relacionar la inmigración ilegal con la criminalidad que sufre su pueblo.

El primer edil ha denunciado el último apuñalamiento, acaecido el pasado 19 de junio en un comercio del municipio, para alzar la voz sobre lo que, a su juicio, sucede. El presunto autor ya ha sido detenido y enviado a prisión, pero para Barroso no es suficiente.

«Con una persona que lleve esto encima –en referencia a uno de los cuchillos que portan estos delincuentes– lo mínimo que deberíamos hacer es mandarla a su país», ha aseverado, al tiempo que ha dicho que si bien no tiene nada en contra de los inmigrantes legales, los ilegales son los responsables de la criminalidad de la zona. «Los propios inmigrantes de nuestro pueblo no quieren la inmigración ilegal, porque son peligrosos».

Discurso «xenófobo»

Las reacciones a la denuncia del alcalde no se han hecho esperar. Para la subdelegada del Gobierno en Huelva, María José Rico, vincular los delitos con la inmigración ilegal es un «discurso xenófobo» y «carente de rigor».

«Relacionar este asunto con la inmigración ilegal, vinculando la comisión de delitos en el municipio con la presencia de inmigrantes, implica no solo un discurso xenófobo, sino un discurso carente de todo rigor basado en un relato incierto, que para nada está avalado con la realidad y con la estadística delincuencial y la tasa de criminalidad de dicho municipio», ha precisado

Barroso también ha respondido las palabras de la subdelegada. «Dígame usted dónde vive, que yo mañana coja un autobús, lo llene de inmigrantes ilegales y los lleve a su calle, a ver qué dicen sus vecinos«, ha llegado a espetar Barroso, que no ha descartado la organización en Cartaya de una manifestación en la calle «contra el Gobierno de España».