El estremecedor relato de una mujer embarazada tras la paliza de unos okupas: «Venían a matarnos»

Eloísa y Óscar, un matrimonio de Bujalance (Córdoba), ha sufrido en sus carnes la pesadilla de la okupación violenta que afecta a Andalucía y toda España. Ambos estaban de viaje en Almería cuando recibieron una llamada en la que se les informaba de que algo sucedía. Ya de vuelta, se encontraron con una desagradable sorpresa y el inicio de su particular drama: su vivienda okupada y sus pertenencias, en la calle.

Ambos llamaron a la Guardia Civil, a los que denunciaron su situación. Pero el asunto iría a peor para ellos, tal y como han mostrado ante varias televisiones. Ni el hecho de estar ella embarazada de unas ocho semanas les libró de la violencia e impunidad con la que actuaron los okupas de su casa.

«Te voy a matar»

«Te voy a matar. Es lo único que me decía», confesaba hace pocas semanas Eloísa ante las cámaras de Canal Sur. Su pareja, Óscar, tampoco se salvó de los golpes. Además de su testimonio, el aspecto que ambos mostraban ante las cámaras, donde han enseñado los golpes, moratones y heridas que sufrieron, es desolador.

«Cuando volvemos, nos encontramos nuestra casa okupada y sin muebles. Nos habían quitado todo, también la televisión. Llegamos a casa a medianoche y yo llegué a entrar hasta la cochera», explica la mujer, «pero me empezaron a golpear con una cadena», explica.

Óscar mostraba la cadena de la que se sirvieron los okupas para rechazarles: «Con ella nos empezaron a pegar a mi mujer y a mí. Luego a mí me pegaron en el brazo con una barra de hierro», cuenta.

Pero la agresión no terminó ahí. «Cuando al día siguiente intentamos rescatar las pertenencias de la basura, volvieron a por nosotros con palos que tenían una punta de hierro».

Finalmente, los cuatro okupas fueron detenidos, y tras un juicio rápido, enviados a prisión. Sin embargo, Eloísa es incapaz de olvidarlo. «Se me ha quedado grabada esa frase de te voy a matar». Por eso, reconoció ante las cámaras que ella se iría de esa casa «porque yo aquí no quiero estar».

«Lo material ya nos da igual, estamos vivos y hemos vuelto a nacer, lo otro se recupera».