
El cardenal y obispo de Sevilla nació en San Fernando
Cádiz
'El arzobispo mendigo': el único cardenal gaditano de la historia nunca llegó a pisar el cónclave
Fue una personalidad imprescindible en la provincia y toda España a caballo entre los siglos XIX y XX
En la larga, larguísima historia de la Curia Romana, no son tantos numéricamente los españoles que han sido cardenales. Menos aun los que han pisado un cónclave para la elección de nuevo Papa como el que arrancó ayer en Roma. Desde Pedro de Cardona, erigido cardenal en 1181 por el Papa Lucio III, apenas dos centenares de españoles han sido purpurados. De esos, solo uno ha nacido en la provincia de Cádiz.
Ese hombre excepcional fue conocido no solo por su distinción eclesiástica sino por su proverbial humildad y atención a los pobres. Se le llamó el 'arzobispo mendigo', fundó la congregación de Esclavas del Divino Corazón, fue obispo, arzobispo y cardenal, fundó periódicos y llegó a ser senador, además de abogado en sus inicios. Lo beatificó Juan Pablo II en 1987.
Marcelo Spínola y Maestre es una de las personalidades religiosas más importantes de Andalucía y España. Se implicó en el devenir espiritual y social de ambos. Nació en San Fernando en 1835, estudió Derecho en Sevilla y regresó a Cádiz para fundar despacho: lo estableció en Sanlúcar de Barrameda. Allí arrancó también su carrera eclesiástica: después de pasar por el Seminario en Sevilla, volvió como capellán de La Merced.
Cardenal desde 1905
A lo largo de más de 30 años fue de todo en la Iglesia y en todos lados: párroco en San Lorenzo (Sevilla), canónigo en la catedral hispalense, obispo de Málaga, arzobispo de Sevilla y finalmente cardenal. Es el único gaditano nombrado cardenal en la larga historia de la Curia. Lo designó el 11 de diciembre de 1905 el Papa Pío X.
Sin embargo, Spínola no llegó a pisar nunca un cónclave para la elección papal. Ni siquiera fue durante mucho tiempo cardenal, ya que falleció el 19 de enero del año siguiente. Antes, pocos días antes, había regresado a Cádiz para bendecir el nuevo santuario de la Virgen de Regla de Chipiona. Sus restos reposan en la catedral de Sevilla, ciudad en la que este isleño dejó una huella imborrable.
Los 'papables' italianos de Cádiz
Spínola es el único gaditano que ha estado a las puertas de un cónclave, es decir, cumplía con los requisitos para asistir e incluso ser elegido Papa, en caso de que se hubieran dado las circunstancias. Es posible rastrear en la historia casos de religiosos vinculados a Cádiz que sí traspusieron las puertas de Capilla Sixtina en un evento de este tipo.
En concreto, cuatro italianos de nacimiento que fueron obispos de Cádiz llegaron a ser cardenales y participaron en sendos cónclaves. El más conocido de ellos fue Oliverio Caraffa, que estuvo en la elección del Papa Sixto IV en 1471. También participó en el cónclave de 1484 que eligió a Inocencio VIII. En 1492 estuvo a punto de ser elegido él mismo Papa, pero el español Rodrigo Borgia subió a la Silla de Pedro con el nombre de Alejandro VI.