Marga Prohens y Manuela Cañadas se saludan en el Parlamento en 2024
Vox cose su alianza con Prohens para relanzar un decreto estratégico tras tumbarle el techo de gasto con el PSOE
El acuerdo entre PP y Vox llega tres días después de que Vox fuerce la prórroga presupuestaria. «De bloqueo nada», reivindica el vicepresidente Costa
La semana en la que Vox hizo pinza con el PSIB para tumbar el techo de gasto, obligando al Govern de Marga Prohens a prorrogar los presupuestos de 2025, ha terminado con una imagen bien distinta. PP y Vox acuerdan resucitar el decreto de aceleración de proyectos estratégicos, la norma que el propio Vox dinamitó hace dos meses y que la presidenta considera fundamental para su mandato.
Tras semanas de discretas negociaciones entre ambos partidos, este viernes, el Consell de Govern ha dado luz verde al nuevo texto, que incorpora ajustes tolerables para el PP que se traducen para Vox en una victoria frente a la implementación de la Agenda 2030. El vicepresidente Antoni Costa lo anunció tras la reunión del consejo de gobierno: «De bloqueo, nada de nada», subrayó.
El precio de este entendimiento pasa por una cirugía minuciosa del articulado. El Ejecutivo acepta retirar todas las referencias a energías renovables incluidas en la primera versión del decreto. Desaparece también la moratoria a nuevos proyectos de renovables que no fueran estratégicos. Es decir, ni se incentivarán estas inversiones mediante un procedimiento exprés ni se suspenderán temporalmente otras iniciativas. El paquete ambiental queda despojado además de alusiones a políticas de circularidad y a la retórica vinculada a la Agenda 2030 que Vox había señalado como línea roja.
Pese a estos cambios, el grueso del mecanismo de aceleración se mantiene y permitirá poner una «alfombra roja» —en palabras de Prohens— para captar proyectos considerados esenciales para modernizar la economía balear. Entre ellos, el Govern conserva la posibilidad de importar residuos desde Ibiza para su incineración en Mallorca, una medida con la que Vox también se había alineado.
Desde Vox se han mostrado satisfechos con la negociación y lo ven como «una victoria decisiva» en el decreto, donde se han eliminado las ZIAE, las modificaciones de la Ley de Carreteras y de Cambio Climático que ponían en riesgo nuestras islas. «Hemos evitado que Baleares acabe como Andalucía, donde el Gobierno del PP está talando olivos para instalar campos de placas solares», reivindican.
Entre los logros destacados por Vox, además de frenar la instalación masiva de renovables en suelo rústico y blindar la propiedad privada frente a expropiaciones forzosas, se encuentra la solución jurídica para el traslado de residuos de Ibiza a Mallorca, paliando la crisis del vertedero de Ca na Putxa, y la protección del sector ganadero mediante la declaración de los mataderos como servicio de interés económico general.
Vox subraya que también ha cerrado la puerta a la discrecionalidad política, eliminando el mecanismo que permitía al Govern aprobar proyectos estratégicos «a dedo», y ha depurado el texto eliminando referencias a «desarrollo sostenible» y «economía circular» consideradas como políticas de gasto ineficiente.