Una exposición fotográfica sobre inmigración que culpa a Europa y «busca crear un 'efecto llamada'»

Frente a un muro fronterizo, un grupo de inmigrantes queda atrapado entre la valla y las sombras de la vigilancia europea. Es la imagen que abre la exposición Europa Fortaleza, organizada por el Ayuntamiento de Manacor, presentada como «una llamada a la reflexión sobre las migraciones, especialmente entre los jóvenes».

La polémica muestra se enmarca en la gestión del tripartito de izquierdas -Més-Esquerra (Més y Esquerra Republicana de Baleares) y AIPC, y el PSOE- liderado por el alcalde independentista Miquel Oliver, quien, según Vox, antepone la propaganda ideológica a las necesidades reales de los vecinos y fomentar un «efecto llamada».

Según el partido de Santiago Abascal, la muestra supone un «derroche» económico que abre las puertas a la inmigración en un pueblo golpeado por la «inseguridad, los servicios sociales desbordados y las dificultades para acceder a una vivienda digna».

'Europa Fortaleza'

La exposición impulsada se presenta como una muestra fotográfica centrada en el fenómeno migratorio y en las fronteras de Europa. Según los gobernantes de Manacor, su objetivo principal es generar «una reflexión crítica sobre las políticas migratorias europeas», poniendo el foco en las personas que intentan llegar al continente y en las dificultades que encuentran durante ese proceso.

De acuerdo con estas formaciones, la exposición pretende visibilizar el sufrimiento humano asociado a las fronteras europeas, mostrando imágenes de rutas migratorias y controles fronterizos. El trabajo señala a Europa por levantar una «fortaleza» basada en muros físicos y legales, culpando así al continente de las medidas de protección que toma frente a la inmigración irregular masiva.

«Culpar a Europa» y «efecto llamada»

El coordinador y portavoz de Vox en el Ayuntameinto Esteban Sureda, considera que «mientras los vecinos de Manacor sufren una oleada de inseguridad sin precedentes, ven cómo los servicios sociales están desbordados, y el acceso a la vivienda digna es una quimera para nuestros jóvenes y familias, ¿a qué se dedica el alcalde Oliver? A pagar una exposición de propaganda ideológica y buenismo subvencionado que sólo sirve para culpar a Europa y fomentar el efecto llamada. Es una burla cruel a los problemas reales de los ciudadanos».

Vox acusa al gobierno municipal de vivir «completamente de espaldas» a las necesidades del municipio, «mientras nuestros vecinos están siendo ignorados por el equipo de gobierno». Sureda califica la exposición como un acto de «cinismo político» y un «derroche inaceptable de recursos públicos».

Propaganda ideológica

«El alcalde separatista Miquel Oliver demuestra, una vez más, que sus prioridades son las de la agenda ideológica de MÉS-ERC, nunca las de los ciudadanos que pagan sus impuestos. Manacor vive un capítulo oscuro en gestión municipal. El gobierno de Oliver es una fortaleza de la desidia, la incompetencia y la propaganda ideológica. Le exigimos que deje de gastar el dinero de los manacorines en estas frivolidades y se ponga a trabajar de inmediato para solucionar la inseguridad, la inmigración descontrolada y la crisis de servicios que padecemos», concluye.

Vox exige la cancelación inmediata de cualquier gasto público adicional asociado a esta exposición y la reasignación de esos fondos a partidas esenciales como el refuerzo de la seguridad y el apoyo social a las familias necesitadas del municipio.