Imagen de la enfermera expedienta por Salut
Cataluña
La Generalitat expedienta a una enfermera gaditana por criticar que se tenga que sacar el C1 de catalán
La chica ha criticado esta medida en un vídeo de Tik Tok en el que aparece con otras dos compañeras y ha provocado la reacción de la Generalitat
El Departamento de Salud y también el hospital del Vall d’Hebron están investigando el vídeo que ha colgado en Tik Tok una enfermera gaditana que trabaja en ese centro hospitalario, y en el que habla del «puto C1 de catalán». En esta publicación, la chica se refiere a la posibilidad de hacer oposiciones en Cataluña, porque «sacan 3.500 plazas de enfermera», pero para ello es necesario conseguir ese nivel de catalán, que ella deja claro, «resulta que se lo va a sacar mi madre».
La enfermera aparece con otras dos compañeras. Una de ellas asegura que sí se va a presentar a las oposiciones y la protagonista del vídeo le dice: «Clara, tía, me estás desmontando el vídeo». Y la tal Clara empieza a hablar en catalán: «Escolta’m noia, que jo puc parlar en català» (escucha, chica, que yo puedo hablar en catalán).
Lo cierto es que el vídeo ha causado un enorme revuelo en redes sociales, hasta el punto de que el consejero de Salud, Manel Ballcells, quien ha dejado claro que «declaraciones como estas son intolerables en una servidora pública. Desde el centro hasta el departamento llegaremos hasta el fondo de la cuestión. Abrimos un expediente. El sistema sanitario tiene que garantizar la atención en la lengua propia de Cataluña, en eso trabajamos cada día».
El consejero también ha insistido en que «ejemplo de buenas prácticas de nuestros profesionales son los que viniendo de donde vengan tienen interés y se forman por aprender, conocer y hablar el catalán. Éstos son la mayoría y los queremos poner en valor». Y ha recordado que el sistema de salud ofrece formación gratuita en catalán para sus profesionales porque el «objetivo final es siempre el bienestar del ciudadano y garantizar los derechos de los pacientes. Comprender al paciente es clave para su seguridad».
Por otro lado, en declaraciones a Efe, desde el hospital Vall d’Hebron aseguran que «no tolerarán» que dentro de sus instalaciones, en horario laboral y con el uniforme del centro, se hagan ese tipo de vídeos «que nada tienen que ver con la actividad asistencial». Y han dejado claro que «no representan la institución ni al centro».
El que no ha dudado en salir a la palestra ha sido el expresidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, quien ha destacado que «el odio a la lengua catalana es una constante entre muchos españoles. Algunos (jueces, policías, funcionarios) militan en la catalanofobia». Cree que hay un «lingüicidio en marcha». Comentaba de esta forma Puigdemont un mensaje de un fotoperiodista catalán, que apuntaba que esta enfermera «no puede trabajar en ningún servicio público».
Desde el sindicato UGT también ha aprovechado para felicitar a la enfermera que sí iba a presentarse a las oposiciones «por valorar la importancia de hablar catalán en Cataluña y por respeto a los pacientes que tienen derecho a comunicarse con el personal de enfermería en la lengua propia. Ojalá tus compañeras también lo entendieran».
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