Imagen de la enfermera expedienta por Salut
Cataluña
La consejería de Salud no renueva el contrato a la enfermera que criticó el C1 de catalán
Este viernes ha sido su último día de trabajo en el Hospital Vall Hebron
La enfermera gaditana que criticaba en un vídeo de Tik Tok el nivel C1 de catalán, deja este viernes de trabajar en la Vall Hebron. Y es que el departamento de Salud ha decidido no renovarle el contrato. Y con el fin del contrato, tanto el expediente que le abrió la consejería por el vídeo, como las consecuencias que pudiera tener, quedan suspendidos. Y es que el expediente estaba ya en trámite, según ha avanzado el digital Vilaweb.
Fue un vídeo que causó un gran revuelo. La chica, que aparecía junto a otras dos compañeras con el uniforme del hospital y en el centro hospitalario, hablaba del «puto C1 de catalán». Se refería a la posibilidad de hacer oposiciones en Cataluña, y para poder optar a una plaza en la sanidad publica catalana, el conocimiento del idioma es imprescindible.
Tal fue el alud de críticas que recibió el vídeo especialmente por parte de los independentistas, que el consejero de Salud, Manel Ballcells, salió a la palestra para dejar claro que «declaraciones como estas son intolerables en una servidora pública. Desde el centro hasta el departamento llegaremos hasta el fondo de la cuestión. Abrimos un expediente. El sistema sanitario tiene que garantizar la atención en la lengua propia de Cataluña, en eso trabajamos cada día».
También desde el hospital se anunció que iban a investigar los hechos y que no iban a tolerar que, dentro de sus instalaciones, en horario laboral y con el uniforme del centro, se hagan ese tipo de vídeos «que nada tienen que ver con la actividad asistencial». La chica llegó a coger la baja por estrés y aseguró que estaba recibiendo ayuda psicológica tras las fuertes críticas.
Críticas del independentismo radical
Críticas que sigue recibiendo por parte del sector más radical después de haberse conocido que el departamento de Salud no le va a renovar el contrato. No son pocos los que se alegran por la noticia, por un lado; pero, por otro, lamentan que ese vídeo no tenga consecuencias reales porque el expediente ha quedado en suspenso.
Algunos aseguran que «estaría bien que lo hicieran todos los inadaptados del mismo nivel, y no sólo enfermeras»; otros se alegran de que «haga las maletas y vuelva a su casa (de donde nunca tenía que haber salido)»; y también los hay en mostrar que les parece «mal que no la hayan expulsado y que se suspendan las medidas disciplinarias. No hay voluntad de proteger la lengua».
Se da también la circunstancia de que el sindicato independentista que señaló a la enfermera por criticar el C1 de catalán, la Intersindical, se ha quedado sin representación en el hospital Vall Hebron tras perder los dos delegados que tenía. Ese es el resultado de las elecciones sindicales que se han celebrado en el Instituto Catalán de Salud (ICS).
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