Los ocho participantes en el debate electoral de TV3.
Elecciones en Cataluña
Vox, Cs y PP acorralan al socialista Illa en el debate de TV3 por su connivencia con el independentismo
El debate se abrió con una formula original, con preguntas entre candidatos que permitió poner de manifiesto la estrategia de cada candidatura
La televisión y radio autonómicas, TV3 y Catalunya Ràdio, celebraron este lunes el último debate electoral de las elecciones catalanas, que se celebran este domingo. La cita tuvo una previa polémica, dado que el presentador del programa matinal de Catalunya Ràdio, Ricard Ustrell, afirmo que no vería el debate de su propia cadena y que el de La Sexta había sido el mejor. Horas más tarde rectificaba y pedía disculpas.
El debate se abrió con una formula original, con preguntas entre candidatos que permitió poner de manifiesto la estrategia de cada candidatura y con qué otras listas compiten. Illa y Aragonés se intercambiaron preguntas mostrando que cada uno busca el voto del otro.
El candidato de Junts interpeló al candidato del PP sobre la presunta represión del Estado durante 2017, y a su vez el candidato de Vox realizó su pregunta al candidato de Junts, al igual que la candidata de la CUP.
La candidata de Sumar abordó a Pere Aragonés (ERC), y Carlos Carrizosa, de Ciudadanos, confrontó con el del PSC. Por último, Alejandro Fernández (PP) devolvió la pregunta al representante de Junts.
Cataluña y España
El bloque, sobre la relación Cataluña – España, lo abrió Carrizosa, que acusó a TV3 de usar terminologías prohibidas por la Junta electoral como «exiliados» para referirse a los políticos independentistas huidos de España para no hacer frente a la justicia. La intervención del candidato naranja llevó a la moderadora, Ariadna Oltra, a polemizar con Carrizosa y le intentó interrumpir.
En este bloque Illa tuvo que aguantar, evitando polemizar con ellos para no alterar las relaciones con La Moncloa, las peticiones de sus socios de referéndum, las reafirmaciones en el proyecto de consecución de la independencia y la afirmación de que España ha tenido presos políticos y tiene exiliados. Las invectivas que un Illa maniatado no pudo lanzar a sus socios de ERC y Junts las dirigió al popular Fernández.
Lengua catalana
En el bloque sobre la lengua catalana todos los partidos excepto Vox, Cs y PP defendieron la inmersión lingüística. El candidato popular acusó a los partidos defensores de la inmersión de hacer del catalán un idioma antipático al imponerlo y de ser responsables de hacerlo retroceder en su uso social.
Illa, de nuevo, no confrontó con sus socios de ERC y Junts, y atacó a Vox y PP por sus presuntas políticas contrarias a las lenguas cooficiales en las comunidades autónomas donde gobiernan juntos. Ignacio Garriga (Vox) acusó a Illa de no haber defendido a la familia escrachada de Canet por pedir la aplicación de la sentencia que imponía una tercera hora semanal de español en las escuelas y de ponerse al lado de los acosadores.
Carrizosa (Cs) afeó a Illa su colaboración en medidas como las sanciones a comercios que rotulan en castellano o las subvenciones a los grupos de espías en los patios escolares que buscan identificar los niños que juegan en español.
Política social
Vox consiguió centrar el tramo de debate sobre política social en la inmigración y la delincuencia, mientras la CUP pedía que se toleraran las okupaciones. Carrizosa aprovechó esta parte del debate para pedir que la Policía Nacional no sea expulsada de la comisaria de Vía Laietana y mantuvo una viva polémica con Rull (Junts) sobre si los catalanes no independentistas son ciudadanos de segunda o no.
Illa dio un golpe de efecto en este bloque al anunciar que Trapero, Mayor de los Mossos en 2017, sería el responsable de la seguridad en Cataluña si el socialista alcanza la presidencia de la Generalitat.
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