Las agresiones sexuales con penetración subieron casi un 10% en Cataluña en 2024

El año pasado se cometieron en Cataluña 510.052 delitos, una cifra ligeramente inferior a la del 2023. En concreto, los delitos denunciados bajaron en 120. Son datos que ofrece el Balance de Criminalidad del Ministerio del Interior con datos recopilados de Mossos de Esquadra, Policía Nacional y Guardia Civil. Baja casi toda la tipología de delitos, aunque hay dos incrementos que son significativos: los homicidios dolosos y asesinatos en grado de tentativa subieron casi un 19 %, y también los delitos sexuales, que crecieron un 4,4 % hasta llegar a los 4.404, según estos datos.

Desde el ámbito judicial como policial han mostrado su preocupación por el aumento de los delitos contra la libertad sexual, especialmente en los últimos años en Cataluña. En 2024 también lo hicieron, aunque desde luego, quedan lejos de las cifras que se registraron en 2023. Entonces, estábamos hablando de incrementos de dos dígitos. Aun así, hay que tener en cuenta que el año pasado, y dentro de los algo más de 4.400 delitos sexuales, 1.742 fueron agresión con penetración, casi un 10 % más, mientras que el resto sumaron 2.662.

Más intentos de homicidio

Luego están los homicidios. En el caso de los consumados bajaron el año pasado casi un 3 %, se registraron 69 frente a los 71 de 2023. Pero sí se han disparado los homicidios dolosos y asesinatos en grado de tentativa. Se ha pasado de 239 a 284, lo que da un porcentaje del 18,8 %. En lo que va de año, en Cataluña, ya se han cometido 9 homicidios. El director de la Policía, Josep Lluís Trapero, aseguró que esta cifra no es habitual, pero también destacó que en los últimos años las cifras habían sido bastante estables, con relación a este tipo de delitos. En Cataluña se ha movido entre los 60-80 homicidios al año.

Por lo demás, los hurtos, que es el delito más habitual, bajaron un 1 % al pasar de 170.000 a 168.500. También bajaron el resto de tipologías de robos, excepto el de vehículos, que creció casi un punto porcentual. Los robos con violencia o intimidación descendieron un 2,7 % y se quedaron en 24.733, mientras que han bajado de forma mucho más acusada los robos con fuerza en domicilios, establecimientos u otras instalaciones. Lo hicieron en un 7,5 % de media.

Con relación a otros delitos, creció el tráfico de drogas un 6,3 %, algo que no sorprende, teniendo en cuenta que Cataluña se ha convertido en uno de los epicentros del tráfico de marihuana, en el «huerto» de Europa, tal y como lo han definido los Mossos de Esquadra. Los secuestros subieron de 11 a 14. La mayoría de estos casos están relacionados con deudas vinculadas al tráfico de droga o al crimen organizado.

Y en lo que respecta a la cibercriminalidad, las estafas bajaron un 3 %. Sin embargo, el resto de ciberdelitos han doblado prácticamente sus cifras, al pasar de 2.200 a 4.000 el año pasado. Estamos hablando, por ejemplo, de suplantaciones de identidad, de acoso o de injurias en redes sociales. En cualquier caso, los delitos cibernéticos que se registraron el año pasado fueron 75.705.

El Prat, a la cabeza por el «efecto aeropuerto»

Y si se observan estos datos desde el ámbito territorial, por municipios de más de 20.000, El Prat encabeza esta lista, y con diferencia, con una tasa de 227 crímenes por cada 1.000 habitantes, cifra que duplica la segunda ciudad, que es Salou (Tarragona). Eso sí, hay que tener en cuenta, y según aseguran desde el consistorio de El Prat, que las cifras «están distorsionadas por el efecto aeropuerto» y en menor medida por el centro comercial Splau. Como decíamos, Salou es la segunda ciudad con una tasa más alta y le siguen Barcelona, Sitges y Sant Adrià del Besòs. En números absolutos, la capital catalana es la primera de Cataluña, con más de 175.867. Por detrás se sitúan Hospitalet, Badalona, El Prat y Sabadell.