León XIII, el Papa que coronó a la Virgen de Montserrat como patrona de Cataluña

León XIV es el nuevo Papa de la Iglesia Católica: ha escogido un nombre que conecta directamente con el elegido por el cardenal Gioacchino Pecci, que gobernó la Iglesia como León XIII entre 1878-1902. Tomó como lema «lumen in coelo», el cual desarrolló plenamente. Todas sus encíclicas demuestran la elevación de su mente.

Fue elegido Papa con 68 años, uno menos que su actual sucesor, León XIV. Entre sus encíclicas debemos reseñar Providentissimus Deus, Arcanum Divinae Sapientiae, De secta Massonum, Libertas, Praestantissimum y, por supuesto, Rerum Novarum, que definió la doctrina social de la Iglesia.

Hasta san Juan XXIII, la Iglesia Católica se dedicó a complementar el gran legado de León XIII. Sus últimas palabras fueron: «no sé cómo me juzgará Dios, pero sé que he amado siempre mucho a la Iglesia y procurado su bien; así pues, muero tranquilo». Murió a las 16 horas del 20 de julio de 1903.

Sobre su papado se ha escrito que abrió una nueva época para la Iglesia Católica. Una era de luz, de misticismo, de sabiduría. La luz de su amplísima inteligencia perduró durante años y fue inspiración para el Concilio Vaticano II. Intentó bajar del cielo la luz para comunicarla a los hombres: una misión que heredará el nuevo papa León XIV.

León XIII y Cataluña

Además, el Papa León XIII tiene una clara vinculación con Cataluña y más concretamente con la Virgen de Montserrat. El 11 de septiembre de 1881, León XIII declaró a la Virgen de Montserrat como patrona de las diócesis catalanas, como fruto de las celebraciones del milenario de su hallazgo, e instituyó su fiesta que, finalmente en 1914 quedó fijada en el 27 de abril.

También declaró el santuario de Montserrat como Basílica Menor. Con el actual Papa León XIV podemos encontrar una similitud, pues consagró una iglesia a Montserrat de Trujillo, en Perú, cuando era obispo de Chiclayo.

Con anterioridad a este acto de León XIII, la figura de Sant Jordi era considerada primordial, siendo el patrón de Cataluña. Ese acto del papa es un momento crucial en la historia religiosa y cultural de Cataluña. El poeta Carles Fages de Climent, en uno de sus poemas, llegó a escribir:

Cuando León XIII la proclamó patrona de Cataluña, decretó su coronación canónica. Fue la primera imagen mariana en España que recibió ese privilegio. Antes de eso, su fiesta se celebraba el 8 de septiembre. El 25 de abril coincidía con las festividades obligatorias de las Letanías Mayores, según algunos autores, por lo que en 1914 se determinó pasarla al 27 de abril.

Con posterioridad recibieron la Coronación Canónica la Merced de Barcelona (1886); la Virgen de la Candelaria de Tenerife, Patrona de Canarias (1889); la Virgen de los Reyes de Sevilla (1904), y la Virgen de la Misericordia de Reus (1904).

La primera misa en América

Con anterioridad a esta declaración de León XIII, hay una historia que une España, Cataluña y el continente recientemente descubierto por Cristóbal Colón. En su segundo viaje, fue con él un ermitaño de Montserrat llamado Bernat Boïl. Nacido en Zaidín, un pueblo aragonés entonces en la diócesis de Lérida, había sido diplomático de los Reyes de Aragón y jefe militar en una de sus expediciones de galeras.

Era ermitaño de la ermita de la Santísima Trinidad, siendo ordenado sacerdote por el obispo auxiliar de Barcelona Gonzalo. Fernando el Católico lo envió muchas veces a negociar con los franceses. Viajó a Francia para conocer mejor a los monjes de la Orden de los Mínimos, cuyo fundador, San Francisco de Paula, le encargó fomentar esta Orden en España.

Los Reyes Católicos lo sacarían de sus retiros y fundaciones para enviarlo como responsable de otros doce clérigos a América, en el segundo viaje de Cristóbal Colón, en 1493. Ese mismo año Fernando el Católico envió al monasterio 14 monjes procedentes de Valladolid, y Montserrat pasó a depender de la congregación de esta ciudad castellana. Bernardo Boyl ha pasado a la historia como el celebrante de la primera misa en el Nuevo Mundo. Fue el 6 de enero de 1494, y en ella estaba presente una imagen de la Virgen de Montserrat.