El artista Nil Safont (Slin Safont) en la exposición
El muralista que pasó de un pueblo catalán a decorar paredes gigantes en Rusia o EEUU vuelve a casa
El Convent de Sant Francesc acoge desde este fin de semana una muestra retrospectiva de Slim Safont, con 45 obras creadas en una veintena de países
El artista urbano y muralista Slim Safont, nacido en Berga en 1995, estrena este sábado en el Convent de Sant Francesc una exposición que reúne algunas de las obras que ha realizado en distintos puntos del mundo, desde Suecia hasta Estados Unidos o Rusia, en un recorrido que refleja la proyección internacional de este joven creador. La muestra, titulada ‘Una història per explicar’, podrá visitarse hasta principios de marzo y está impulsada por el área de Juventud del Ayuntamiento de Berga con el apoyo de la Diputación de Barcelona, según informa la Agència Catalana de Notícies. El consistorio subraya que el objetivo es acercar la cultura a todos los públicos y dar a conocer el talento local de un artista que ya trabaja en 18 países.
Una retrospectiva en Berga
La exposición reúne 45 piezas entre pinturas, dibujos, fotografías y creaciones en distintos formatos que permiten seguir la evolución artística de Slim Safont. En conjunto, la muestra se presenta como una mirada retrospectiva que combina historias personales, procesos de trabajo y experiencias acumuladas en murales repartidos por buena parte de Europa y otros continentes, de acuerdo con los datos difundidos por la Agència Catalana de Notícies.
El proyecto está comisariado por Joan Pallé y se inaugurará con un acto abierto al público en el Convent de Sant Francesc, un espacio que el Ayuntamiento de Berga quiere consolidar como referente cultural de la ciudad. La iniciativa se enmarca en la apuesta municipal por visibilizar a los artistas locales con más proyección internacional y reforzar la oferta cultural dirigida especialmente a los jóvenes.
Safont explica que el hilo conductor de la exposición es contar las historias que hay detrás de cada mural, poniendo el foco en la proximidad con el entorno donde trabaja. Para ello, se acerca a los barrios, conversa con los vecinos y documenta escenas cotidianas mediante la fotografía, que más tarde se transforma en pintura mural.
El artista recuerda que comenzó haciendo grafitis en las calles de Berga y, con el tiempo, se interesó tanto por la pintura mural como por la pintura clásica y moderna. Su formación en Bellas Artes en Barcelona le proporcionó la base técnica para seguir experimentando y consolidar un lenguaje propio, siempre guiado por la intuición y una evolución rápida en apenas siete años de trayectoria.
En sus inicios, Slim Safont trabajaba a partir de fotografías encontradas en internet, pero pronto optó por generar su propio material gráfico. Esa decisión le permitió documentar directamente los temas que más le atraían y trasladarlos a paredes de gran formato, un método que sigue utilizando hoy, según relata a la Agència Catalana de Notícies.
Entre sus motivos recurrentes destacan la juventud, la infancia y la adolescencia, que combina con paisajes o espacios urbanos que le resultan sugerentes visualmente. La elección de colores, el juego de sombras y la composición de la luz son elementos clave de su obra, que busca generar imágenes potentes y reconocibles en el espacio público, según la misma información de la agencia.
Murales emblemáticos dentro y fuera de España
A lo largo de su carrera, el artista señala dos momentos especialmente significativos: un viaje a Estados Unidos, donde realizó cuatro murales en un mes a partir de fotografías propias, y una estancia en Rusia en la que pudo pintar un mural de 60 metros que tuvo un fuerte impacto. Estas experiencias consolidaron su método y le abrieron nuevas puertas internacionales, de acuerdo con la Agència Catalana de Notícies.
Actualmente, su trabajo puede verse en 18 países, con murales en Irlanda, Escocia, Portugal, Italia o Suiza, además de diversos puntos de Cataluña y del resto de España. Entre sus obras más destacadas figura un mural en Torregrossa dedicado a los hombres y mujeres del campo, considerado la obra de arte rural más grande de Cataluña, así como ‘Dels primers d’arribar fins avui’, premiado en un concurso internacional de arte urbano y pintado en bloques de viviendas en Vilanova i la Geltrú.
Primer trabajo audiovisual y apuesta por el talento joven
La exposición en Berga también incluye el primer trabajo audiovisual de Slim Safont, realizado junto a la artista y arquitecta Ana Maggioli. La pieza se inspira en la vida de tres adolescentes de una localidad alemana con los que trabajaron durante dos semanas, e incorpora un mural en su propio barrio y un código QR que permite al visitante conocer mejor la historia de los protagonistas.
En la propia ciudad de Berga, el sello del artista ya es visible en un mural dedicado a los pasteleros a la entrada de la calle Mayor. El concejal de Juventud, Isaac Santiago, destaca que la muestra quiere evidenciar el talento joven del municipio y reconocer la labor de un creador que está dejando su huella en muros de todo el mundo, además de acercar la cultura a los más jóvenes y reforzar el arraigo local del arte urbano.