El presidente de la Generalitat Valenciana, Ximo Puig

El presidente de la Generalitat Valenciana, Ximo PuigEFE

Puig espera el informe sobre el tren detenido en el incendio de Bejís mientras su consellera culpa al Puesto de Mando

El presidente valenciano asegura desconocer si la Generalitat tendría que haber avisado a Renfe y Adif de la evolución del incendio

La polémica y las explicaciones sobre la circulación de un tren destino Zaragoza por la localidad castellonense de Bejís –cuando esta estaba envuelta en llamas– han saltado al terreno político con distintos tonos a la hora de expresarse sus protagonistas.
Curiosamente, estos no corresponden uno al Gobierno y el otro a la oposición. En este caso, ambos están dentro del Ejecutivo valenciano. Uno de ellos es el del presidente de la Generalitat Valenciana, Ximo Puig. El jefe del Consell, tras la reunión mantenida con el CECOPI, el organismo autonómico de coordinación a la hora de actuar frente a emergencias como los incendios, ha afirmado que espera «un informe riguroso y lo más delimitado posible» en relación con las actuaciones ese día y por qué se tomaron o no determinadas decisiones.
Con un perfil bajo y queriendo evitar polémicas, Puig ha asegurado que una vez conocidas las conclusiones del informe solicitado «se llegará hasta las últimas consecuencias» y ha indicado que, en su momento, «se tendrán que asumir las responsabilidades correspondientes».
Asimismo, el presidente valenciano ha querido poner de relieve las condiciones climáticas en la zona y momento de los hechos: «Un cambio disruptivo enorme y terrible del viento», por lo que ha zanjado el tema asegurando que ahora le toca a la Justicia.
Por otra parte, llama la atención que sea el propio presidente del Consell el que reconozca que desconoce «en este momento» si tendría que haber sido la Generalitat Valenciana la responsable de haberse comunicado con Renfe, más aún teniendo en cuenta que pocas horas antes había presumido de la importancia de activar el CECOPI para mejorar la coordinación entre administraciones y efectivos de extinción y así actuar de forma más rápida y efectiva.

Asunto judicializado

Un bombero durante las labores de extinción del incendio de Bejís (Castellón)

Un bombero durante las labores de extinción del incendio de Bejís (Castellón)EFE

Quizás Puig utilizó un tono más conciliador porque su propia consellera de Justicia e Interior, Gabriela Bravo, minutos antes había responsabilizado directamente al Puesto de Mando Avanzado (PMA) de que el tren hubiese podido circular sin avisos previos: «Ante una emergencia, y más con un incendio, es el PMA quien dirige la extinción del incendio y ahí se toman todas las medidas necesarias para proteger la vida y la integridad física de las personas», aseguró Bravo.
En esta línea, la consellera insistió en que corresponde al PMA «adoptar la decisión, comunicarla a la Agencia de Seguridad y Emergencias de la Generalitat y a través de esta se traslada al resto de organismos».
Así, Bravo ha dicho que es «evidente» que Renfe no recibió ninguna notificación «porque si no se habría interrumpido la circulación del tren», pero ha vuelto a poner en la picota al Puesto de Mando Avanzado aseverando que la Generalitat tampoco tuvo «ninguna indicación del PMA».
La consellera insistió en que el tema está «judicializado» y que, por tanto, ahora le toca a los tribunales «dilucidar qué pasó dentro del tren, tanto antes como después, y también respecto a esa falta de comunicación» respecto a por qué no se solicitó la suspensión de la circulación y tampoco se comunicó a Adif ni Renfe.
Al igual que Puig, Bravo hizo referencia a las condiciones climatológicas: «A las 15:00 tras la reunión del CECOPI no se preveía el desalojo de Bejís, pero quince minutos después la situación cambió de forma destructiva con vientos erráticos y obligó a variar la estrategia», aseguró.
Coche calcinado en el incendio de Bejís (Castellón)

Coche calcinado en el incendio de Bejís (Castellón)EFE

Sin embargo, Bravo se olvidó de señalar que desde que se toma la decisión de evacuar el municipio a las 15:22 hasta que sale el tren desde Valencia, pasan 61 minutos y hasta que el convoy se detiene pasan dos horas y media. De hecho, es el propio departamento de Emergencias de la Generalitat, de la que Bravo es la máxima responsable, la que anuncia en sus perfiles de redes sociales los avances del fuego en Bejís y las medidas que se van tomando desde el Consell. Todas menos el aviso de que se interrumpe la circulación de trenes cerca del incendio.
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