PSOE y Compromís harán pagar a los vecinos el agua de la limpieza de garajes anegados por la dana en Paiporta

El Ayuntamiento valenciano de Paiporta ha rechazado la propuesta presentada por el Partido Popular en el pleno ordinario del mes de enero para que el Consistorio asuma el coste del agua utilizada por los voluntarios en la limpieza de bajos y garajes tras la dana del pasado 29 de octubre. La moción, que buscaba aliviar la carga económica de los vecinos que cedieron agua para los trabajos de limpieza, no salió adelante debido a los votos en contra de PSOE -quienes gobiernan el municipio- y Compromís. Esta decisión ha generado un profundo malestar entre los afectados.

La riada causó estragos en Paiporta, dejando barrios completamente anegados por el lodo y todo el material arrastrado por la fuerte corriente de agua. La magnitud del desastre obligó a la intervención de equipos profesionales, pero también movilizó a un importante contingente de voluntarios que colaboraron en las labores de limpieza. Muchos vecinos facilitaron agua de sus viviendas para estas tareas y, hasta ahora, mantenían la esperanza de recibir una compensación por parte del Ayuntamiento. Sin embargo, la negativa del Gobierno municipal ha supuesto un duro revés para quienes hicieron este esfuerzo ante la falta de recursos por parte de la Administración, que tendrán que costear ellos mismos.

Durante el pleno, el concejal socialista Alejandro Sánchez justificó la negativa de su partido mostrando una factura y explicando que «todas las viviendas de la población ya están exentas tanto de la tasa TAMER como del consumo de agua en el último trimestre». Sin embargo, esta exención generalizada no contempla de manera explícita el agua utilizada para las labores de limpieza de los bajos y garajes afectados, lo que ha sido motivo de críticas por parte de los damnificados y de la oposición de PP y Vox.

Por su parte, el portavoz de Compromís, Pep Val, argumentó que su grupo no podía apoyar la propuesta de los 'populares' debido a la falta de concreción en el coste total de la medida. «Normalmente, cuando se hace una propuesta económica se define un gasto, ¿estamos hablando de mil euros o de un millón?», cuestionó durante su intervención.

El debate en el pleno generó una fuerte reacción entre los asistentes, que reprocharon la decisión del Gobierno socialista. Durante la retransmisión en directo de la sesión a través de internet, se pudieron escuchar protestas de los vecinos, hasta el punto de que la alcaldesa, Maribel Albalat, tuvo que intervenir en repetidas ocasiones para pedir orden. «Llegará el momento en el que podáis decir todo lo que queráis, pero cuando se acabe el pleno», sentenció la primera edil socialista.