Imagen de la droga incautada en un taxi por la Policía Local de Elche.
El «regalito para su madre» que ha incautado la Policía al pasajero de un taxi
El varón acabó denunciado por un delito contra la salud pública
El trabajo de los agentes de Policía Local, Policía Nacional y Guardia Civil es pura sorpresa. Sólo con salir a las calles a patrullar o realizar algún tipo de control se abre la posibilidad de que pase cualquier cosa. En Elche esta misma semana los agentes locales detuvieron al pasajero de un taxi que portaba «un regalito para su madre» y acabó denunciado por un delito contra la salud pública. La Policía Local no se creyó que 1,5 kilos de hachís fueran el mejor regalo posible de un hijo a la persona que le ha dado la vida.
El cuerpo policial tenía desplegado un «control preventivo» en la ciudad y llegó un taxi en elq ue viajaba, al parecer, el conductor con un cliente. Los agentes revisaron hasta una caja de grandes dimensiones que llevaba el pasajero sentado en el asiento trasero y saltó la sorpresa al comprobar qué había en su interior.
Antes del hallazgo de 1,5 kilogramos de hachís en bolsas, el varón había justificado que era un «regalito» que iba a entregar a su madre. Pero la fiesta no acabó bien. Los agentes procedieron a realizar el test para certificar que era una sustancia estupefaciente y al arrojar un resultado positivo detuvieron al hombre por un delito contra la salud pública.
Los agentes hasta se permiten utilizar la ironía ante esa excusa mal utilizada y cierran su publicación con un sarcástico «ahora será la madre quien tendrá que llevarle tabaco y chocolatinas». Los traficantes se buscan cualquier método para transportar la droga y en esta ocasión la casualidad quiso que el hombre se viera acorralado y pensara que una justificación tan sentimental le salvaría de acabar en la cárcel.