Imagen de José Manuel Cuenca tomada este viernes a su llegada a los Juzgados de Catarroja
El jefe de gabinete de Mazón, de nuevo ante la jueza de la dana por los WhatsApp con Salomé Pradas: «Están descontextualizados»
José Manuel Cuenca no ha podido entregar los mensajes a la magistrada al carecer de copia de seguridad
José Manuel Cuenca, jefe de gabinete del expresidente de la Generalitat Valenciana Carlos Mazón, ha regresado a los juzgados de Catarroja para testificar por los WhatsApp aportados al procedimiento el pasado día 5 por la exconsellera de Justicia e Interior Salomé Pradas.
Cuenca fue citado de nuevo por la jueza que investiga la gestión de la catastrófica dana del 29 de octubre de 2024, que ha dejado 230 víctimas mortales, tras los nuevos WhatsApp de los que él no habló en su primera declaración.
El jefe de gabinete de Mazón se ha presentado en el órgano judicial a las 9.20 horas -estaba citado a las 9.30 horas- y ha evitado hacer declaraciones a los medios de comunicación que le esperaban en la puerta.
En su declaración ante la magistrada, ha negado haber dado instrucciones a la exconsellera de Justicia e Interior Salomé Pradas el día de la catastrófica dana y ha asegurado que los WhatsApp que ella ha aportado a la causa judicial están «descontextualizados».
En ese momento, la jueza le ha pedido que aporte entonces sus mensajes con Pradas, a lo que él ha contestado que no podía recuperarlos porque no tenía copia de seguridad en el teléfono.
Tal y como se desprende de los WhatsApp aportados por Pradas a la jueza de la dana, la exconsellera advirtió a Cuenca, a las 16.28 horas del día de la riada, de que les habían informado que había un fallecido en Utiel (Valencia). Sobre este extremo, el jefe de gabinete de Mazón no mencionó nada en su primera declaración.
Pradas y Cuenca se intercambiaron varios mensajes como consecuencia del temporal y de la situación que atravesaba Utiel: «La cosa se complica», le dijo la primera a las 14.25 horas. Dos horas más tarde, a las 16.28 horas, la exconsellera le volvió a mandar otro mensaje para alertarle de un fallecido: «Nos informan de un fallecido en Utiel».
Transcurridos 15 minutos, Cuenca, sin hacer referencia al fallecido, le reenvió un texto del expresidente que decía «igual a las 19 horas vamos a 112», a lo que Pradas contestó: «perfecte -perfecto-».
A partir de este momento, hubo más mensajes entre ambos en los que Cuenca le pidió que no confinaran a la población --sobre este asunto tampoco indicó nada el jefe de gabinete en el juzgado-. Esto ya fue cerca de las 20 horas: «Salo. De confinar nada por favor. Calma». La exconsellera le respondió entonces: «Está la cosa muy muy mal», y él le dijo: «Ya, mujer». A lo que Pradas agregó: «Desbordamientos por toda la provincia».
Cuenca insistió: «Pero confinar una provincia es una barbaridad. Una cosa es zonificar. Comarcas. Ribera Alta. Costera. En fin. Pero no toda la provincia». Pradas le respondió: «Es que poco se queda fuera. Y comunicaciones afecta a todos. Estamos en ello. Pedir precaución a todos. Confinamiento áreas afectadas y alejamiento (subir plantas) unos cuentos municipios». Esto era a las 19.58 horas.
Y el jefe de gabinete seguía con sus argumentos frente a estas medidas: «Salomé, per a confinar -para confinar- hace falta un estado de alarma. Y eso lo decreta la chica que tienes al lado, la delegada. Calma».
Pradas le respondió a las 20.15 horas, una vez enviado el Es-Alert a la población: «Sí, pero confinamiento podemos decretar por ley emergencias». Cuenca contestó: «Llévate açó del cap per favor -quítate eso de la cabeza-. Tranquila, ché».