El Ministerio de Sanidad anuncia que las mascarillas vuelven a ser obligatorias en los centros sanitarios
La delegada de Salud recuerda que el uso de la mascarilla está sujeta a «decisiones técnicas y no criterios políticos»
María Jesús Botella ha querido emitir un «mensaje de tranquilidad» ante la incidencia en esta época de los virus respiratorios
La delegada territorial de Salud de la Junta de Andalucía en Córdoba, María Jesús Botella, ha recordado que el uso de la mascarilla debe ajustarse a «decisiones técnicas y no a criterios políticos», en respuesta a la decisión del Ministerio de Sanidad de imponer su obligatoriedad desde mañana miércoles en los centros sanitarios, tras la reunión del Consejo Interterritorial de Salud celebrado ayer con las comunidades autónomas en Madrid. La decisión se ha tomado en virtud del artículo 65 de la ley de cohesión y calidad del Sistema Nacional de Salud, que regula la declaración de actuaciones coordinadas en salud pública y que «obliga a todas las partes» incluidas en ella.
En este encuentro Andalucía «no ha votado en contra de su uso», ha matizado la delegada, ya que la mascarilla «está recomendada» en nuestra comunidad desde hace seis meses, a través de una instrucción publicada el 13 de junio de 2023. Botella ha dicho que la ministra Mónica García «habla desde el desconocimiento de las comunidades autónomas» y ha concretado que la medida adoptada por la Consejería de Salud afecta a centros de mayores y personas con discapacidad «en recintos cerrados», además de su uso obligatorio en centros sanitarios para persona sintomática o en las UCI. La Junta de Andalucía también recomienda su utilización en los transportes públicos. Pero es una recomendación, no una obligatoriedad, ha insistido la delegada.
«En caso de epidemia se extendería el uso», ha aclarado la responsable de Salud, para recordar que, a pesar del incremento de atención en las urgencias, «el sistema está tensionado, no colapsado».
'Plan de Alta Frecuentación'
María Jesús Botella ha apelado constantemente al denominado ‘Plan de Alta Frecuentación’, activado desde octubre del pasado año, y que es el termómetro que sirve al Servicio Andaluz de Salud para monitorizar las circunstancias y escenarios que se están dando, por ejemplo, en esta época del año. Un plan que determina diversas fases de situación según las circunstancias y que va desde la fase 0 a la 4. Según Botella, el 21% de los centros hospitalarios en Andalucía se encuentran en la fase 0 y ha añadido que la tasa de incidencia, cuya media nacional es de 952 por 100.000 habitantes, en la comunidad andaluza a fecha de ayer era de 505.
María Jesús Botella, durante su intervención
El Plan de Alta Frecuentación, por tanto, sirve para «adaptar los recursos materiales y humanos» según las circunstancias. «Estamos en muy buenas manos», ha dicho la delegada, que ha querido así enviar «un mensaje de tranquilidad» ante el sentido que, según Botella, se le está dando a la información de la incidencia de los virus en determinados medios. «Ya no nos acordamos de cuando había camas en los pasillos», ha apuntado la responsable de Salud, cuestionada por la numerosa asistencia de pacientes a los servicios de Urgencias cordobeses. Una situación ésta que según la delegada «no es nueva» y que es habitual en esta época «desde hace muchos años, aunque ahora las cosas están mucho mejor», ha matizado.
Vacunación todos los jueves
María Jesús Botella ha puesto el acento en la importancia de la vacunación sobre todo para las personas mayores de 60 años, mujeres embarazadas y niños. Así, la delegación ha habilitado diferentes puntos en los distritos sanitarios, con horario de mañana y tarde, a los que se puede acudir sin cita previa todos los jueves. Son cuatro en el Área Norte, quince en el Área Sur, y veinte en la zona Córdoba-Guadalquivir. La delegada ha informado
La autobaja, «una medida inaudita»
Tras la reunión ayer lunes del Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud (CISNS) extraordinario para abordar el incremento de la incidencia de los virus respiratorios, la ministra de Sanidad, Mónica García, informó sobre el planteamiento de una «autobaja responsable de tres días» por enfermedad leve para evitar la saturación de los centros.
La delegada territorial, preguntada por esta iniciativa, ha dicho que la considera una «medida inaudita» y que no le parece «razonable». De todas maneras sí ha defendido la «desburocratización» de las administraciones y ha dicho que es uno de los «objetivos del gobierno andaluz, pero que debe estar basada en criterios serios y rigurosos».
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